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** Reducir número de APNs.
** Arbitrariedades en SETRAVI.
** Falta Unidad en el PAN.
Las Agrupaciones Políticas Nacionales (APNs) nacieron legalmente con las reformas a la Ley Electoral hace 30 años.
La idea era que las APNs fueran la base para la creación –surgimiento y desarrollo- de nuevos partidos políticos.
Durante mucho tiempo, no se consideraron en la Ley, apoyos con recursos públicos para las APNs, ya que fue hasta 1996 cuando comenzó a discutirse sobre las prerrogativas que se les proporcionarían.
Una fuerte limitación que aún tienen las APNs es que no pueden participar directamente con candidatos a puestos de elección popular.
Sin embargo existe una gran flexibilidad en la Legislación Electoral, lo que ha permitido el surgimiento de una gran cantidad de APNs en los últimos años, por lo que actualmente existe un exceso de ese tipo de organizaciones políticas.
Hasta enero del presente año existían 107 APNs con registro y apoyo con recursos oficiales y aunque sólo absorben el 2% del total de los recursos que se entregan a los 8 partidos políticos que existen actualmente; el hecho de que sean más de 100 asociaciones de este tipo, las convierte en organizaciones costosas para la democracia mexicana.
Durante el presente año las APNs costarán a los contribuyentes casi 54 millones de pesos, sin que se observe su contribución a la gobernabilidad y estabilidad política del país.
Dentro de las más de cien APNs que tienen registro hay muy pocas que están trabajando con seriedad, la prueba es que sólo tres de ellas están buscando su registro político: Rumbo a la Democracia, de Rodolfo Bastida Marín; Alianza Social, de Antonio Calderón Cardoso y PATRIA -Profesionistas, Académicos, Trabajadores Rurales, Industriales y No Asalariados-, de Roberto Antonio Villaseñor Aceves y Jorge Sánchez Palma.
La volatilidad y debilidad política y social de las APNs es evidente, baste recordar que sólo en lo que va de 2007, tres de esas agrupaciones perdieron su registro ante el Instituto Federal Electoral –IFE-. Se trata de la Fundación Vicente Lombardo Toledano, desde donde se pretendía hacer resurgir al Partido Popular Socialista; Confluencia Ciudadana Chimalli, que es dirigida por Aurelio Pérez Herrera y El Centro de Estudios para el Desarrollo de México, que lidera Guadalupe Villaseñor Villalobos.
Sobre estas dos últimas organizaciones parece ser que sólo son membretes y que no tienen una base militante consolidada. Con excepción de la Fundación Vicente Lombardo Toledano que agrupa a exmilitantes del PPS y que parece que sí está realizando un trabajo serio con una base ideológica socialista, las otras dos organizaciones sólo tuvieron un año de vida, ya que recibieron su registro en el 2006 y lo perdió hace unos días.
Los Legisladores y el Instituto Federal Electoral deben hacer una revisión a fondo del funcionamiento de las APNs y seguir con la tendencia de retirar el registro a ciertos membretes que tienen reconocimiento oficial y que sólo se han convertido en fantasmas receptores de recursos públicos e instrumentos de extorsión de funcionarios y ciudadanos, que llegan a confiar en ellos como gestores sociales.
MURMULLOS
Siguen las amenazas contra periodistas
La periodista Mari Carmen Flores, de Televisa, quien se ha caracterizado por sus reportajes de denuncia sobre prácticas de corrupción y manipulación electoral por parte de funcionarios públicos de Baja California. Recientemente recibió la visita de algunos malandrines que forzaron las cerraduras y se introdujeron a su casa para hacer una serie de desmanes hasta dejar el lugar convertido en un desorden total, sin embargo, no se llevaron ninguna cosa de valor de la casa de la periodista.
El mensaje es claro, o le baja de tono a sus reportajes o su vida corre peligro.
Por lo pronto, las autoridades decidieron ponerle vigilancia y protegerla. Manifestamos nuestra solidaridad con la compañera, ante esto que le hicieron que parece un juego de niños pero es un importante mensaje, que significa que debe cuidarse.
Arbitrariamente despiden a trabajadores de la SETRAVI
Mucho daño están haciendo a la imagen y a las aspiraciones políticas futuras de Marcelo Ebrard, colaboradores como Raúl Armando Quintero Martínez, director de la Secretaría de Transporte y Vialidad –SETRAVI-, uno de los máximos exponentes de esa izquierda cachirula que nos han intentado vender discursivamente con la candidatura del Peje, los perredistas que han gobernado el Distrito Federal.
Armando Quintero surgió de las filas del sindicalismo universitario, sin embargo, los procesos de corrupción en que ha intervenido ahora le permiten vivir una vida holgada y llena de lujos y por ello no se ha tentado el corazón para actuar como verdugo de un grupo de trabajadores a los que ordenó despedir sin por lo menos explicarles el motivo por el cual los despojó de su empleo.
Desde diciembre en que llegó a hacerse cargo de la dirección de la SETRAVI, Armando Quintero emprendió una campaña de despidos injustificados en contra de varios trabajadores de todo tipo.
Amparado en la falacia del ataque a la corrupción ha generado un caos en esa dependencia del gobierno del Distrito Federal, ya que ha contratado a una serie de ignorantes que se dicen sus amigos y estos a la vez a otros, por lo que actualmente hay un desorden laboral en ese organismo encargado de la regulación del transporte público en la ciudad de México.
Armando Quintero, quien ha utilizado su disfraz como “sindicalista” y “luchador social” para hacerse de cargos públicos y de elección popular dentro del PRD, no ha tenido el menor reparo para violar la legislación laboral y los derechos adquiridos durante varios años de trabajo por un número importante de empleados de la dependencia que hoy le tocó en la repartición pejista.
El argumento que les dieron a los empleados que despidió Armando Quintero es que no apoyan las movilizaciones del “Peje” López Obrador y no aportan 20% para la causa de las mafufadas que está realizando el excandidato presidencial en el país. Urge la intervención de Marcelo Ebrard para poner un alto a las injusticias que está cometiendo Armando Quintero y para que se indemnice o se les devuelva el empleo a los trabajadores que despojaron.
Armando Quintero en vez de estar realizando despidos a diestra y siniestra en la SETRAVI debería estar encarcelado, pues cuando fue líder de la fracción parlamentaria del PRD en la Asamblea Legislativa del DF, se le realizaron auditorias que evidenciaron malos manejos, por ejemplo la firma de contratos de bienes o servicios con sobreprecios y asignados de manera irregular, lo que incluso llevó a la destitución de su excolaborador el oficial mayor de la ALDF, José Coca González, quien ya ha sido habilitado en el actual Gobierno y ahora despacha en el Metro como Coordinador de inventarios y Administración de Riesgos. Otro colaborador de Armando Quintero, Gerardo Montero Palma, salió de la ALDF, sin comprobar en qué gastó 157 mil pesos.
Además, Armando Quintero en la ALDF fue el claro ejemplo del nepotismo: contrató a su cuñado Martín Mejía Zayas, como secretario particular con un salario de 56 mil 142 pesos, quincenales, y a su "sobrino" Osvaldo Martín Mejía Quintero como asesor con un sueldo de 15 mil pesos quincenales. Asimismo existen pruebas de que incluyó en la nómina por lo menos a otros 5 familiares, incluida su esposa o exesposa Leonor Campuzano González.
A lo mejor por eso está ahora quitándole el empleo a los trabajadores de la SETRAVI, para seguir con la tendencia que ha seguido en los últimos años y hacer de esa dependencia perredista, la primera controlada por una tribu familiar y de amigos. ¡Para eso quieren los votos!.
Se espera la renuncia de Manuel Espino a la dirigencia del PAN
Por el bien del país debe terminar la confrontación pública entre la Presidencia de la República y el Partido Acción Nacional. La confrontación política terminaría si los grupos internos del blanquiazul presionan para una pronta salida de Manuel Espino Barrientos de la dirigencia nacional de ese partido. Adelantarle un año el término de su gestión sobre la base de un acuerdo de su Consejo Político, toda vez que está entorpeciendo el ejercicio gubernamental del Presidente de la República y deteriorando la imagen del panismo en la opinión pública nacional e internacional.
Manuel Espino, con el control de los dirigentes panistas en el Congreso Héctor Larios y Santiago Creel respectivamente, y apoyado por otros exfuncionarios vinculados al anterior sexenio, han estado confrontando al Presidente de la República, desde que era candidato del PAN.
Se ha dicho que Manuel Espino es representante de un grupo de ultraderecha que infiltró el partido blanquiazul para proteger intereses grupales y que desde su arribo a la dirigencia nacional ha tenido una confrontación extrema con los panistas tradicionales, a los que por cierto pertenece el actual Presidente de la República.
Los panistas tradicionales ante la actitud de Manuel Espino han optado por dejarlo sólo para que exhiba su casi nula capacidad de convocatoria Han existido reuniones a las cuales se han invitado a más de mil personas y sólo han asistido unas 300 a eventos importantes organizados por el dirigente nacional del PAN.
La conducta de Manuel Espino ha hecho que ya no participen en las tareas y eventos del blanquiazul personalidades de ese partido como: Diego Fernández de Cevallos, Carlos Medina Plascencia, Alberto Cárdenas y Luis H. Álvarez.
Una confrontación entre el Presidente de la República y su partido, no la hubo en la historia del priísmo en el poder, porque generalmente la cuerda se rompía y se romperá por lo más delgado; falta poco para decir, good by, Manuel Espino.
Por: Juan Jacobo Cázares G.
http://www.barahundapolitica.com.mx/
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