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En días pasados la ciudad de Guadalajara se vio engalanada con la visita del Dr. Barry Sears, del Instituto Tecnológico de Massachusetts, el médico es autor de 12 libros relacionados con este tema y esuna de las personalidades a nivel mundial que ha cambiado la historia de la nutrición y la salud en el mundo, dicho evento se llevó a cabo en la sucursal Plaza Fontana, uno de los restaurantes de la Dieta de la Zona. La anfitriona fue la famosa y polémica Dra. Silvia Orozco, alumna de Sears y la más talentosa nutrióloga de todo México, quien presentó al Dr. Sears a los ahí presentes: médicos, nutriólogos, enfermeras, estudiantes de nutrición, clientes, pacientes, uno que otro enfermo, medios de comunicación y público en general. Gentilmente, el Dr. Barry Sears, después de su ponencia concedió una entrevista en exclusiva a www.informanet1.com. En ella detalló que durante varias generaciones, cada varón de la familia paterna del Dr. Sears ha muerto por situaciones similares: ataques cardiacos prematuros, que han acabado con sus vidas, acortándolas varias décadas. Después del fallecimiento de su padre en 1972, a la edad de 54 años, Barry Sears se dio cuenta que dentro de él hacia tictac una bomba de tiempo genética. Sabía que no podía cambiar sus genes, pero estaba determinado a procurase expectativas de vida más normales y sanas.
Reglas de la Zona
“Mi búsqueda para liberarme de este estigma me llevó a una conclusión sorprendentemente simple. Resulta que para lograr una vida más larga y mejor no tiene que ver con una píldora o poción mágica, sino con una poderosa hormona que se produce a partir de lo que uno come, llamada insulina. Mis investigaciones mostraron que si uno era capaz de insulina dentro de cierta zona, ni muy altos ni muy bajos, podía mejorar dramáticamente la salud y prevenir una amplia gama de enfermedades. A la vez el cuerpo empezaría a usar la grasa como energía, permitiéndole perder el peso excesivo ¡sin sentir hambre!”
Este hallazgo científico ocurrió el mismo año que se otorgó el premio Novel de cómo se descubrieron ciertas hormonas que pueden controlar la inflamación. Entonces, el Dr. Sears empezó a desarrollar una dieta que pudiera controlar estas mismas hormonas; toda esta investigación comenzó con los atletas, por eso le ha llamado la Dieta de la Zona.
Las reglas son muy sencillas, basta tener un ojo y una mano.Paracada alimento tiene uno que dividir el plato en tres secciones iguales: en un tercio de plato se coloca un tercio de las proteínas bajas en grasa como pollo o pescado, que no sea mayor que la palma de la mano, los otros dos tercios del plato se van a llenar con frutas y verduras, y como punto final se le agrega un puñadito de o una pequeña porción de ácidos grasos que sean ricos en omega 3, bajos en omega 6 y bajos en grasas poliinsaturadas, de estos pueden ser guacamole o aceite de oliva.
La pirámide nutricional del USDA, no tiene bases científicas
De acuerdo al Dr. Sears, tanto la religión como este sistema se basan en una serie de creencias, este sistema de creencias no responde muy bien a los retos o aun reto. Sin embargo, en los altos nivelesde investigación médica, la Dieta de la Zona no está bien aceptada, porque hasta hoy todo el trabajo clínico ha demostrado que esta dieta es superior para poder controlar la inflamación de las células. Hace cinco años el Instituto de Investigación en Diabetes en Estados Unidos hizo sus propios lineamientos para el tratamiento de esta enfermedad, y estos lineamentos fueron esencialmente la Dieta de la Zona.
“Si se compara-añade-el componente de control de la insulina de mi programa dietético con el del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, siglas en inglés), se obtiene un cuadro muy distinto: pirámide alimentaria de la USDA y pirámide alimentaria de la Zona. La única similitud es que ambas son pirámides. Aparte de eso, parece que no hay relación entre ambas. ¿Acaso estoy diciendo que el gobierno de Estados Unidos está totalmente equivocado en sus recomendaciones dietéticas? Bien, pues sí; y no soy el único que lo dice, Walter Willett, presidente del Departamento de Nutrición en la Escuela de Salud Pública de Harvard y un profesor de Medicina de la Escuela de Medicina de Harvard han realizado recientemente las siguientes declaraciones: “La pirámide del USDA no es correcta. Se construyó sobre una base científica que merece poco crédito”, “La pirámide del USDA ofrece unas recomendaciones flojas, sin fundamento científico… nunca se ha comprobado si verdaderamente funciona”.
Caloría de proteína y caloría de hidrato de carbono Una de las principales objeciones de Walter Willet a la pirámide alimentaria del USDA es que nunca se sometió a pruebas. En cambio, sí que se ha comprobado y cada estudio publicado lo ha demostrado que las recomendaciones dietéticas del Dr. Sears son superiores a las del Gobierno. Por ejemplo, los nutricionistas dicen con frecuencia “que una caloría es una caloría”, y punto. Como contraste, el Dr. Sears, afirma que las consecuencias hormonales de una caloría de proteína son distintas de las de una caloría de hidrato de carbono, y que son distintas, incluso, de las de una caloría de grasa. Las recomendaciones dietéticas de nuestro entrevistado se basan en consideraciones hormonales, mientras que la pirámide alimentaria del USDA, la dieta de la Asociación Norteamericana del corazón, y muchas otras “dietas mágicas” respaldadas por los médicos, se basan en consideraciones calóricas.
La Zona del antienvejecimiento
Según el Dr. Sears, lo que causa el envejecimiento es un aumento en la inflamación, la Dieta de la Zona es una dieta antiinflamatoria, al controlar la inflamación a partir de los alimentos que consumimos podemos entonces controlar el proceso del envejecimiento. Una gran ayuda para prevenir el envejecimiento y las enfermedades son los ácidos grasos omega 3, que se encuentran en el aceite de pescado; en altas concentraciones son unos agentes antiinflamatorios muy poderosos. Entonces, al combinar la Dieta de la Zona que es antiinflamatoria con ácidos grasos ricos en omega 3 que también son antiinflamatorios, contamos con una gran receta para la antiinflamación. El problema, el día de hoy, es que los pescados que están en el medio ambiente están contaminados con las toxinas. Por lo tanto, a mayor cantidad de pescado que comemos, consumimos mayor cantidad de contaminantes. “Más, sin embargo-complementa, la solución que encontramos fue consumir el aceite de pescado y concentrar aquella porción rica en omega 3 y diluido, quitando todos los contaminantes. Esto acaba con el dilema de la contaminación del pescado en el medioambiente.”
Los eicosanoides
El Dr. Sears explicó que los eicosanoides tanto buenos y malos se encuentran en cada célula de nuestro cuerpo, es una cuestión de balance. El ser humano necesita ambos, pero se tiene más malos que buenos es cuando se crea la inflamación. Cuando esto sucede, es el primer paso para la enfermedad crónica. Por lo tanto, la Dieta de la Zona fue diseñada para poder rebalancear los niveles de los eicosanoides buenos y malos en cada célula del cuerpo.
La Dieta de la Zona se encuentra en varios países: Chile, Argentina, Colombia, Brasil, Italia, Grecia, España, Suiza, Australia, Alemania, Japón y México
El rango AA/EPA
Antes de que nuestro cuerpo empiece a acumular exceso de grasa, baja su rendimiento físico y mental, incluso antes de que empiece a envejecer visiblemente y a desarrollar las enfermedades crónicas que acompañan al envejecimiento, existe una inflamación subclínica que afecta nuestro corazón, cerebro y sistema inmunológico. Esta inflamación silenciosa no genera el dolor, hinchazón y aspecto rojizo asociado con la inflamación clásica y por lo tanto sigue sin tratarse durante años. Investigaciones recientes han comprobado que este tipo de inflamación silenciosa, es causado por un desbalance hormonal crónico no controlado. La inflamación silenciosa es un área gris, donde uno no está “bien” pero tampoco se está diagnosticado gravemente enfermo. De cualquier manera la calidad de vida va en declive lentamente hasta que los síntomas de la enfermedad crónica aparecen.
Las siglas AA/EPA es una abreviación de ácido araquidónico, este es el ácido graso que hace a los eicosanoides malos y EPA es la abreviación del ácido eicosapentaenoico y éste es el que hace a todos los eicosanoides buenos. Así que el balance de estos en el cuerpo es equivalente al nivel que se tiene en la sangre de uno contra otro, de manera que mientras la proporción del AA sobre el EPA sea menor, será entonces también menor la inflamación total del cuerpo.
Todos podemos beneficiarnos en la Zona
En México es muy fácil para que cualquier persona de cualquier grupo económico o social puede entrar en la Zona, pues hay muchas frutas y verduras en nuestro país, también hay mucho pescado y pollo. Solamente se necesita el compromiso para crear ese balance en el plato, y si lo logra, no importa el lugar donde viva, no necesitan ser alimentos frescos, pueden ser alimentos congelados. Lo único que se necesita es crear un balance adecuado, en México se tiene todo lo necesario para crear esta dieta, y aunque se compraran frío o congelados, aun así, es mejor tener un producto congelado que estar comiendo pan, grasa, tortillas, pizzas, alimentosque en verdad son dañinos y que aumentan la inflamación. “Por ejemplo, si usted es increíblemente pobre y lo único que puede comprar son frijoles, éstos contienen muchos carbohidratos. Lo que tiene que hacer es añadirle queso a los frijoles, convirtiendo este alimento en un platillo de la Zona, porque el queso es la proteína necesaria que le falta al frijol”.
El Dr. Barry Sears concluyó con la entrevista, señalando que el pollo, últimamente, contiene mucha grasa porque los productores de pollo quieren que éstos crezcan lo suficientemente rápido para poder matarlos; y la mejor manera de que crezcan, es inyectándolos con hormonas, es un buen negocio, pero muy mala nutrición.
Mayor información: Aurelio L. Gallardo #725
Col. ladrón de Guevara, Guadalajara, Jal.
Tel. 3840-4900/01
Lada sin costo: 01800-777-9662
Por: Héctor Medina Varalta
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