Informanet Videos
Los home port desde el año 2000 a la fecha, propiciaron que la
hotelería prácticamente no creció, afirma la Universidad del Caribe; poco
aportan al PIB y a los ingresos para el país
Cuando Micky Arison miró el calendario electoral de México supo
que el momento había llegado.
Por Luciano Núñez / Luces del Siglo
Cancún, Qna. Roo., a 7 de agosto de 2012.-Dueño de una fortuna estimada por Forbes en 4.7 billones de dólares (es el
número 223), el C.O de la mega empresa de cruceros, Carnival Corporation y el
equipo Miami Heat’s, calculó que el cambio de gobierno en México era una buena
oportunidad para escalar de casillero en Forbes, que tiene al mexicano Carlos
Slim en el primer peldaño.
El objetivo, según los especialistas consultados, es abaratar combustible,
incrementar sus destinos en el Caribe y ser prácticamente dueño del néctar
turístico de los países a cambio de prácticamente nada. Sería otro sueño hecho
realidad de Micky.
¿Figurará su anhelado home port en Quintana Roo en la lista de todo lo que se
puede comprar con dinero? La resistencia ha sido mucha desde que la secretaria
de turismo, Gloria Guevara Manzo, llegó a Quintana Roo y deslizó la intención
del gobierno federal, que no es otra que la de Felipe Calderón Hinojosa. Los
hoteleros se fueron de bruces y pusieron por delante el impacto que tendría un
“home port” en la economía local, la hotelería y hasta el medio ambiente. Las
razones: este tipo de turismo moviliza más de 16 millones de turistas al año.
Sólo a Cozumel llegaron casi tres millones de turistas en 2010, cuya derrama es
incuantificable pero exigua para los locales.
Mientras, el billonario prepara desde su lujosa mansión en Miami una jugada de
pizarra con un bufete de abogados que busca lograr los permisos para tener un
pedazo del paraíso a costa de un puñado de impuestos que poco rédito deja a los
gobiernos. Las ganancias anuales de su corporativo superan los dos mil millones
de dólares. No es para el asombro: Carnival controla más del 40 por ciento del
mercado en el Caribe y 49 del mundial. A cambio, se supo de manera extraoficial
que el grupo ofreció una inversión de 200 millones de dólares, y se habla de la
construcción de otro puerto en Los Cabos a cambio de anclarse en el Caribe
Mexicano.
¿Qué es Carnival Corporation? En los últimos años se convirtió en una empresa
con el esquema de oligopolio que pasó de tener un capital de 12 cruceros en los
años 2000, a 103 barcos con capacidad para 205 mil 769 pasajeros. Carnival
domina el mercado mundial y detrás le siguen Royal Caribbean y Star Cruises
asociada con NCL. Actualmente, la naviera interesada en obtener su home port en
Quintana Roo es dueña de otras diez empresas que, si bien tienen su autonomía,
fueron fusionadas en los últimos años por Arison. Entre ellas figuran P&O
Cruises, Holland, Seabourn, Costa y Cunard.
El secretario de turismo, Carlos González, admitió que al gobierno del estado
llegaron dos estudios sobre el impacto del home port: uno presentado por el
hotelero Fernando García Zalvidea, que no tiene ningún respaldo académico; y el
último que hizo la Universidad del Caribe que está en análisis. “Por eso es que
el gobernador (Roberto Borge) solicita otro estudio a la Universidad de
Monterrey”, manifestó. Y aclaró que los permisos de construcción los otorgan
los gobiernos estatal y municipal, “siempre y cuando cuenten con permisos de
impacto ambiental”. En pocas palabras, atenuó, el alboroto lo causó la
funcionaria del presidente saliente, “el gobierno del estado no va a hacer nada
a espaldas de los quintanarroenses ni a afectar un sector que muestra
crecimiento y solidez como el hotelero. No hay prisa", manifestó.
¿Por qué el interés en un home port? Un home port es un puerto de cruceros en
el que se originan o terminan los viajes. El interés de Carnival, según la
investigadora y docente de la Universidad del Caribe, Claudia Inés Martínez, es
generar un circuito en el Caribe que abarate el único costo que las navieras no
han podido reducir: el combustible. Es así como, en vez de pernoctar en los
puertos, los cruceros van a baja velocidad (ahorrando combustible y gastos de
anclaje) hasta que llegan a otro puerto donde sólo se quedan, en promedio, de
seis a ocho horas. La lógica empresarial es reducir costos, y no estaría mal en
ese sentido, si no fuera que la regulación ambiental en altamar les permite
arrojar todo tipo de desechos, siempre y cuando sea a una distancia mayor a las
12 millas. Los grandes cruceros tienen capacidad para más de cinco mil
personas, y aunque cuentan con tecnología para incinerar, las cenizas van a
parar al mar en la mayoría de los casos.
El rector de la Universidad del Caribe, Arturo Escaip, sintetizó que el estudio
que ellos realizaron dice que la evolución de los destinos con home port, desde
el año 2000 a la fecha, arroja que en esos centros turísticos la hotelería
prácticamente no creció. “Creció sólo en 3.9 por ciento”; dice. En cuanto a la derrama,
apunta que es seis veces menor a que deja la hotelería. “Un crucerista deja 88
dólares con 66 centavos, y la que se queda en un hotel, es esa cantidad
multiplicada por seis puntos”, detalla.
En cuanto a la contribución al valor agregado del crucerista en México equivale
a .04 por ciento del PIB, y la contribución del sector turístico de México
equivale al 7.8 por ciento, compara. “Un home port en un destino como el
nuestro, que tiene 70 mil cuartos de hotel entre Cancún y la Riviera Maya, no
necesita, ni le conviene que se ofrezca un sustituto de viajes de crucero”,
opina.
De acuerdo a la visión del rector de la Unicaribe, para otros destinos como
Campeche, Majahual, Progreso, Huatulco, Iztapa, “no sólo les conviene, sino que
podría ser una gran ayuda y un gran detonador y una gran bondad tenerlo, pero
aquí es una competencia muy fuerte que nos bajaría aún más la derrama al
destino que de por sí está bajando.
-¿Quién está impulsando este proyecto?
- No lo sabemos. A nosotros nos convocaron a raíz de una visita que hizo la
Secretaría Federal de Turismo y empezó a rebotar con los hoteleros la
posibilidad de hacerlo. Los hoteleros le pidieron que se hiciera un estudio y
nos convocaron para hacerlo.
-¿Cómo midieron el impacto sin conocer el proyecto?
-Fíjese, nosotros para hacerlo más justo y equilibrado posible a nuestro
estudio, buscamos mayores datos del proyecto, por ejemplo, conocer el monto de
inversión, impacto en la economía, qué nuevas áreas se desarrollarían, pero no
tenemos ningún dato, no se conoce ningún dato de un proyecto de inversión
específico, detallado, que vaya acompañando a esta propuesta. No podemos hacer
un análisis de las ventajas y las desventajas que en su momento una inversión
de esta naturaleza pudiera tener…
A raíz de este estudio, la Universidad del Caribe encontró que el dato de la
baja en la derrama económica es más que alarmante. Los números arrojaron que
bajó al cincuenta por ciento en el caso de los turistas extranjeros con
respecto a 2008. El investigador de la misma universidad, Alfonso de Jesús
Jiménez, lo atribuye al famoso esquema de All Inclusive que poco a poco acaba
con restaurantes y negocios del casco histórico de Cancún. Fue la Secretaría de
Desarrollo Social la que aportó datos sobre el cierre de locales y viviendas
abandonadas que ya representan el 10 por ciento, y hasta más en algunos
sectores. A los que se suman el elevado números de suicidios, alcoholismo y
violencia.
“Imagínese usted, si la derrama ya ésta caída, obviamente si sustituimos
algunos pocos turistas que están dejando esta derrama baja por una que sea seis
y media veces todavía más baja, pues intensificábamos estas consecuencias, nos
afectaría pero sin duda, y te digo nuevamente, son datos, no opiniones”, aclara
el rector.
No es un proyecto nuevo. Hace 10 años el grupo Xcaret liderado por Miguel
Quintana Pali impulsó el home port. Como ahora, la oposición fue tenaz y en un
debate ríspido por los intereses en juego. Un acalorado debate se dio en 2009
entre los hoteleros: José Chapur, Fernando García Zalvidea y Cia, versus el
grupo Xcaret con el presidente municipal de Cozumel como mediador, en ese
entonces el actual secretario de turismo Juan Carlos González. La razón es que
los home ports compiten directamente con el mercado hotelero bajo condiciones
sumamente ventajosas. Actualmente, un crucero de la categoría standart puede
costar hasta 70 dólares la noche; mientras la hotelería muestra valores de 100
dólares por día promedio. El grupo que presentó de manera presurosa un estudio
evidencia el impacto en la economía. El gobierno lo tomó como un puñado de
hojas con variables de dudoso rigor, dado que nadie lo avala. Desde la otra
esquina, el grupo Xcaret salió a defender el home port: “Reforzaría la
conectividad, abriría el espacio para los amantes de los cruceros y ayudaría en
las temporadas bajas del turismo convencional”, dijo Quintana Pali. Un dato:
Carnival vende el producto Xcaret en sus barcos.
Acaso el mayor valor de “reclamo” lo tengan las cartas enviadas a Guevara Manzo
y hasta el presidente de la Nación por Rodrigo de la Peña, presidente de la
Asociación de Hoteles de Cancún, Rafael de la Mora, de Hotelera Posadas, José
Chapur Zahoul, Alejandro Zozaya, de amresorts, Miguel Ángel Guardado Preciado,
de Barceló y Fernando García Zalvidea, de Real Resorts, y Julián Balbuena
Alonso, del poderoso grupo Best Day Travel. Todos hablan de total rechazo, de
la exención de impuestos, el impacto a los bancos de corales y fauna marina,
así como la descarga de basura, residuos tóxicos y el mínimo ingreso económico,
a cambio de la breve visita de cruceros. Sin embargo, ningún grupo hotelero ha
medido el impacto en la economía local como consecuencia de los contratos
laborales que rozan la esclavitud en la Zona Hotelera y la Riviera Maya. Contra
todo y contra todos, el sueño de Micky sigue intacto. Y ser uno de los hombres
más acaudalados del mundo… tiene sus ventajas.
-o0o-
“NADIE CONTABILIZA CUÁNTOS BAJAN DEL CRUCERO”: INVESTIGADORA
Pagan pocos impuestos. No tienen temporada baja. Surcan el mar Caribe con105
por ciento de ocupación (dan la posibilidad de que el hijo se hospede con los
padres). Navegan con bandera del país que legislaciones más blandas les ofrezca
y nadie mide su impacto en las economías locales.
Son algunas conclusiones a las que ha llegado la investigadora Claudia Inés
Martínez, quien termina su doctorado “Destinos Preferenciales del Turismo de
Cruceros en México”.
Para la docente de la Universidad del Caribe no sólo son una competencia para
los hoteles, dado que son hoteles móviles: compiten directamente con los
destinos turísticos al tener concesionados puertos o los llamados “home ports”.
En entrevista con Luces del Siglo, la catedrática explica en detalle la
dinámica del crucero que pone en jaque a hoteleros y a la industria turística
que es principal palanca de desarrollo de Quintana Roo.
-¿Por qué el interés de tener un home port en Quintana Roo?, se le pregunta.
-Caribe Oeste es la ruta con mayor cantidad de cruceros en todo el mundo, el 70
por ciento de los recorridos se hacen sobre esta zona. Desde 2002 Carnival es
concesionaria en Cozumel, tiene Roatán (Honduras) y tarifa preferencia en
Majaual.
La lógica que persigue es localizar otra terminal en Riviera para que dejen de
ir a Caimán y sus barcos transiten en un polígono más reducido y abaratar
costos de combustible. Es lo único que no pueden controlar.
- ¿Cómo es el esquema para abaratar costos?
- Hay rutas circulares y lineales. Para que rindan, manejan un día de
navegación y un día de puerto, esa es la lógica. Hoy, el aumento del
combustible ha generado que las navieras estén buscando disminuir el costo del
combustible. Hay dos formas: que el recorrido de los destinos sea cercano, e ir
despacio para gastar menos. La única forma de ir despacio es cuando están
contiguos. Carnival ofrece escala en Cozumel y Playa del Carmen. ¡A menos de
20millas!
- ¿Quién regula a estos barcos en materia laboral, ambiental?
- La gran mayoría viaja con bandera de conveniencia, es decir, un barco de una
empresa norteamericana navega con bandera de Panamá o Bahamas, ¿por qué?: es la
legislación impositiva y ambiental que regula ese barco. Cualquier delito
laboral o ambiental se regula por la bandera del barco. Son legislaciones más
flexibles, casi todos lo hacen porque disminuyen hasta un40 por ciento los
costos.
Inés Martínez es licenciada en turismo, tiene una maestría y termina su
doctorado en Geografía con la tesis sobre los cruceros. Fue por cuatro años
docente en la Universidad de Quintana Roo, en Cozumel, donde se interesó
justamente por el fenómeno de los cruceros.
- ¿Qué particularidades tiene esta dinámica turística?
La modalidad que la hace única es la movilidad, capacidad de camas días noche,
es inversión móvil. Se mueven en función de las modas, conflictos como el
terrorismo, crisis sanitarias (Influenza), huracanes, guerras, son las grandes
ventajas.
“Es una actividad que se planea con dos años de anticipación. Se hace un muy
buen trabajo de mercadeo, se cambia la oferta, se adapta a las capacidades de
la demanda. Ya no son las vacaciones de los retirados, ahora hay cruceros a
Disney, para familias y niños, para solos y solas, de lujo, para parejas,
temáticos. Hay una diversificación que llega a más segmentos de mercado”.
- Es un segmento que ha crecido...más accesible
- Ahora es barato porque es económico para la clase media y media baja de
Estados Unidos, cruceros de 400 dólares por cinco días, hablamos de 70 dólares
por noche en un crucero. Así han entrado al mercado masivo, esto se llevó
adelante desde los 70 y en los 80 dieron este salto de crecer y diversificarse,
la concepción de hotel flotante cambió, ahora son destinos flotantes. Es su
éxito. Ya no compiten con hoteles, sino con destinos. Si Las Vegas tiene 20
millones de turistas al año, el crucero puede captar uno o dos millones de
turistas al año.
- ¿Cuál fue el impacto en Cozumel?
- Antes, el que viajaba en crucero era un poder adquisitivo alto, y se quedaba
a hacer lo que se llamó over night, quedarse la noche en puerto. Aumentaban sus
gastos de atraque y la permanencia del pasajero aumentaba, y con ello, el
gasto. Antes de Wilma era común salir y ver cruceros atracados, y la vida
nocturna era activa.
“Reconocen los prestadores que cambiaron las condiciones con Wilma, la crisis
del 2008, y el precio del combustible. A la naviera no le da gran ganancia
quedarse la noche, porque acelera para llegar al otro puerto. El promedio de
permanencia de un crucero es de seis a ocho horas. Ahora a las seis de la tarde
se van despacio y amanecen en Majahual, por ejemplo.
- ¿Qué dicen las estadísticas?
- Es un gran detalle la estadística: nadie contabiliza cuántos bajan del
crucero. Todas las estadísticas las pasan con pasajeros transportados, pero no
descendidos; en ningún puerto se los contabiliza, no existe ningún molinete que
cuente los que bajan, y en todos varía.
-¿Cuál es el promedio que baja a disfrutar de los destinos a los que llegan?
- Se estiman “a ojo” por las excursiones. En Ensenada baja el 30 por ciento de
los pasajeros. En Cozumel es en el que más descienden por el buceo, es Caribe,
pero ha impactado mucho en la economía. Hay prestadores que dicen que el gasto,
según mediciones, marca 89 dólares, pero los prestadores se ríen y hablan de 50
y 20 dólares, no hay estudios sobre eso. Hay uno, pero es una consultora
estadounidense que las mismas navieras contrataron. Y dan como argumento el
tipo de cruceristas que llegan.
- ¿Cuál es la regulación en altamar?
- Data del 79, porque esas condiciones las regula sólo el país de bandera:
cenizas de los incineradores, aguas negras, cada puerto es distinto. Con
respecto a lo que haga cuando está atracado, Cozumel es estricto porque está
cerca del parque marino, pero en altamar puede pasar cualquier cosa. El
convenio internacional dice que las aguas residuales se pueden descargar a
cuatro millas de la costa desmenuzadas y desinfectadas, y a 12 millas si no lo
son.
- No hay forma de controlar.
- La cantidad de envases que trae el mar no siempre es de la gente que va a la
playa.
Según la investigadora, existen tres tipos de pasajeros de acuerdo al poder
adquisitivo: standart, Premium, Luxury y Destination. En los últimos años a
Cozumel llegan un 44 por ciento del tipo masivo: standart, el que maneja
mayoritariamente Carnival que, aún dominando el mercado, lo quiere ampliar.
En los cálculos gubernamentales generalmente se multiplica el número de
pasajeros por el promedio de gasto de 89 dólares para medir la derrama que,
nunca coincide con los datos que arroja la realidad hotelera de Cozumel. Si
bien es uno de los destinos que más porcentaje de pasajeros que baja a tierra,
entre 50 y 60 por ciento, muchos de ellos sólo lo hacen para caminar y sentir
de nuevo que pisan la seguridad de la tierra firme.
- ¿Cómo ve la decisión de tener un home port en Quintana Roo?
- La decisión de sí o no es una decisión que mejor le convenga a la comunidad,
que es la que se debería beneficiar. Mi negativa, o más bien alerta, es por
quién está detrás de la inversión, que es el grupo más fuerte de cruceros que
tiene 10 compañías que concentra el 49 por ciento del mercado mundial.
“El fin es posicionarte en distintos segmentos de una manera voraz, con la
compra o concesión de islas, de espacios dentro de islas para crear sus
espacios privados, que compiten con un puerto. Por ejemplo, llegan a Haití y la
gente ve una isla y ni saben dónde llegan, es como si fuera un club de playa.
Tienen su cayo, su isla, para hacer escalas exclusivas, atracan en su
propiedad.
- Carnival tiene varias concesiones…
- Tiene en Cozumel (Puerta Maya), en Roatán (Honduras), en Dominicana desde el
año que viene (Bahía Maimón), y quieren tener otra terminal suya y obtener
mayores ganancias.
- Dentro de este esquema, de gran ganancia para las navieras, cuál es la
ganancia para la gente.
- Muy mínimo el beneficio. Es poco. Lo que pagan de atraque es para el mismo
grupo; pagan aduanas, migración, Sagarpa, impuesto al pasajero (dos dólares), y
queda el gasto del pasajero en tierra. Están los que bajan “por la libre” y los
que contratan en el barco una excursión, que reduce la contratación de
servicios en tierra. Ahí se queda con ellos la ganancia.
“El porcentaje que se lleva el barco por esos productos, depende del puerto y
la compañía, ronda el 50 y 70 que se queda en la naviera. Es un negocio redondo.
No porque es Carnival. Pero los que van a poner las reglas del juego van a ser
ellos que tienen estas prácticas.
.
regresar/home