Con velada musical concluyo el homenaje a Bañuelas

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México, D. F., a 11 de mayo de 2008

La Fundación Sebastián y la Fundación René Avilés Fabila rindieron homenaje a la parte musical del cantante Roberto Bañuelas el pasado viernes 9, en la cual estuvieron presentes el contratenor Héctor Sosa, el maestro Francisco Viesca y a la doctora Betty Zanolli Fabila, además de la velada musical con destacados intérpretes.

Al concluir la mesa redonda, el barítono Juan Carlos Bañuelas, la soprano María José Rodríguez, el tenor Carlos Montemayor, la esposa de Bañuelas, la soprano Hortensia Cervantes, la soprano Rocío Rodríguez y el propio Bañuelas, acompañados por los pianistas Olga Ruiz y Antonio Bravo, deleitaron a al público asistente con sus geniales interpretaciones.

En el foro de la Fundación Sebastián estuvieron presentes interpretaciones de Tosti, Puccini, Schuman, así como arreglos a poemas y textos de Nicolás Guillén, Enrique González Martínez, Carlos Montemayor, Rubén Bonifaz Nuño y el propio Bañuelas, entre otros.

Frente a la concurrencia del auditorio de la Fundación Sebastián, Héctor Sosa rindió tributo "al primer barítono de México, y la voz más importante del país", de cuyas actuaciones en la ópera dijo tener muchos y muy gratos recuerdos, además de la fortuna de haber compartido el escenario un par de ocasiones.

Sosa compiló y publicó un disco compacto doble, con grabaciones en vivo del homenajeado, el cual calificó como un testimonio de 20 años de la carrera en México de Roberto Bañuelas, el cual contiene grabaciones en vivo realizadas en el Teatro del Palacio de Bellas Artes, en las que quedó patente su inigualable sensibilidad musical y la monumental calidad de su voz.

"Esa experiencia me dio la oportunidad de revivir varios momentos gloriosos de la carrera de don Roberto. Y es que estoy convencido de que, como dice la frase de Martí, pocas cosas nos brindan tanta fuerza para seguir adelante como el reconocimiento de las glorias pasadas. La vida de Roberto Bañuelas es un claro ejemplo de ello, pues como cantante, como pintor, como poeta, como compositor, como escritor y como maestro, no ha dejado de regalarnos glorias nuevas y de ser el artista insuperable que todos nosotros admiramos y queremos"

Después, habló el docente de la Escuela Nacional de Música, Francisco Viesca, quien como el mismo dijo, no estaba programado para hablar en este evento, pero se mostró muy contentó por el tributo realizado a Bañuelas, ya que dice que México no es un país que esté acostumbrado a reconocer a los que logran sobresalir en el arte.

"Su vida ha estado dedicada a la música, no supo frenarse ante la adversidad, supo abrirse camino, supo decidir a pesar de oposiciones familiares y sociales y ha logrado llegar a la cúspide; es trascendental que no ha perdido esa humildad, no perdió esa visión de su actividad, de lo cotidiano", dijo.

Viesca añadió que "cando uno ve sus pinturas, nos damos cuenta de que no solo se dio tiempo para cantar excelentemente, sino que se ha dado tiempo para reflexionar sobre su propuesta artística en aras de la sinceridad y de la autenticidad".

Y agregó: "Lo único que Bañuelas ha querido es cantar, no tenía otra pretensión más, evidentemente eso no era una falsa humildad, era una propuesta artística, cuya proyección ha tenido los frutos que la dedicación le ha dado al cabo de todos estos años, yo calificaría la trayectoria académica y artística de Roberto Bañuelas con una palabra, que es generosidad, porque no se guarda nada, basta leer sus textos, ver sus pinturas y dejarse impresionar por eso que él proyecta para entrar en un universo donde la autenticidad es el rasgo primordial de su existencia".

Asimismo, el escritor René Avilés, quien organizó este tributo, expresó que Roberto Bañuelas ha dado muchísimo al país, y a lo largo de la semana de homenaje, donde se reconoció su faceta como pintor, escritor y ahora como cantante, la Fundación Sebastián y la Fundación René Avilés Fabila le reconocen su arte en todas las ramas.

"Hemos podido reconocerlo como artista plástico, lo hemos podido apreciar como un gran escritor y ahora justamente como un extraordinario músico, un hombre muy completo en realidad, en un aspecto de la cultura, en donde en todos ha tenido un gran éxito, a mi me regocija ser su amigo, ser su admirador y compartir su música, su pintura y su literatura", expresó.

Luego cedió la palabra a Betty Zanolli Fabila, quien expresó que "Bañuelas es un hombre magistralmente dotado con el sublime don del canto; además de ser un artista que proyecta su don y obra, es un maestro que despierta el espíritu artístico en todo aquel que es formado bajo su guía".

Destacó que Bañuelas es "músico, literato, pintor. Es encarnación viva del ser artista, ya que cada vez hay menos representantes que nos puedan legar y transmitir en toda su plenitud esa herencia secular que el mundo debe cultivar y pasar a las nuevas generaciones; es un heredero intemporal, un hombre crítico de su momento porque ha sido formado en la cultura clásica, en la moderna y en la contemporánea, para poder advertir y vislumbrar el futuro de la cultura y el arte que nos aguardan".

"Es uno de los más grandes cantantes que México ha dado al mundo, y su extraordinaria voz una de las mas bellas del repertorio baritonal de todos los tiempos. Su magnifico registro, su vigorosa fuerza, su emisión impecable, el dominio del legato, su dicción perfecta, su fraseo elegante, su impecable musicalidad, son la mejor referencia de lo que es la verdadera técnica vocal", añadió.

"Solo él logra estremecer hasta lo más hondo del alma del que escucha cuando música y literatura se funden en una sola voz" finalizó Betty Zanolli Fabila.

Roberto Bañuelas comentó que su primera audición fue con un grupo tropical en donde descubrió que lo suyo era la música clásica y que nunca se inscribió a la Facultad de Arquitectura como lo querían sus padres, sino al Conservatorio Nacional de Música y que vivió de las becas que ganó.

Mas tarde se inscribió en la Academia de la Ópera de Bellas Artes estudiando con excelentes maestros y en donde formó un repertorio con 30 operas que posteriormente llevó a los Estados Unidos y luego a Europa, donde llegó a hacer 34 años de servició profesional en la ópera como recitalista, hasta llegar 50 años de trayectoria artística

Luego se dio paso al concierto donde se interpretaron obras de autores clásicos y varias piezas del músico Roberto Bañuelas, el cual, al finalizar el evento recibió los reconocimientos por parte de la Fundación Sebastián y la Fundación René Avilés Fabila por su trayectoria artística.


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