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Ø La legendaria agrupación se presentará en el Teatro Metropólitan el 3 de julio, a las 19:30 horas.
El legendario grupo chileno Quilapayún, dirigido por Eduardo Carrasco, tendrá un Reencuentro con México, pues se presentará el jueves 3 de julio, a las 19:30 horas, en el Teatro Metropólitan (Independencia 90, Centro Histórico), invitado por el Centro Cultural El Juglar
La poderosa presencia de Quilapayún surge de su inigualable calidad interpretativa, de su fortaleza que está hecha no sólo de grandes canciones, que han sido el emblema de libertad para América Latina, sino también de combates, exilios, proyectos y el indisoluble compromiso con los mejores valores de la democracia.
Quilapayún fue creado en Chile el año de 1965 por iniciativa de tres estudiantes, entre ellos, Eduardo Carrasco, su director emblemático. El nacimiento de Quilapayún coincide con las luchas reivindicativas que acompañan el surgimiento de un poderoso movimiento social en Chile. Este periodo está marcado también por un interés creciente hacia la música de raíz folklórica de la cual Quilapayún aparece como uno de sus principales exponentes.
Apoyado en sus orígenes por Ángel Parra, dirigido enseguida por Víctor Jara, el grupo alcanza rápidamente una dimensión nacional y en 1967 realiza una primera gira en Europa, lo cual contribuirá a su notoriedad internacional.
En 1970, el presidente Salvador Allende nombra a los miembros de Quilapayún "Embajadores Culturales del Gobierno de Chile". Con este título realizarán varias giras internacionales.
Así es como en agosto de 1973, salen de Chile para participar en actividades artísticas de la Conferencia de Países No Alineados en Argelia, y para presentarse en Francia, en particular en el l'Olympia de París.
Los esbirros de Pinochet los sorprendieron en vísperas de ese concierto, obligándolos al exilio, y a recorrer el mundo, difundiendo un canto que despertó en todos lados la simpatía y la solidaridad hacia un Chile que sufría bajo la dictadura. Obtuvieron asilo político en Francia y realizaron una intensísima actividad. En el plano escénico esto se tradujo en unos 90 conciertos por año en los 5 continentes.
Desde Paris como puerto de salida, las voces de los Quilas se repartieron así por el mundo. Punto memorable de este periodo, fue un vibrante recital de más de dos horas en el Palau Blau Grana de Barcelona repleto de un público fervoroso, aún bajo el franquismo en 1974. El recital programado en Madrid al día siguiente fue prohibido y Quilapayún tuvo que salir de España obligado por las autoridades. Sin embargo, algún tiempo después Eduardo, Hernán, Carlos, Willy, Rubén, Hugo y Guillermo pudieron volver libremente y realizar numerosos recitales a lo ancho y largo de la España democrática, país que constituyó así su segunda residencia durante su exilio en Europa, después de Francia.
Para darse a entender por públicos de distintas latitudes, Quilapayún se esforzó por incorporar el humor y la poesía en sus recitales, de la misma manera su espíritu de apertura los llevó a colaborar con compositores chilenos de música más elaborada tales como Luis Advis, Gustavo Becerra, Sergio Ortega o bien con el actor y director teatral francés Daniel Mesguich, la cantante Paloma San Basilio en España, la actriz Jane Fonda en los EE UU, o Giann Maria Volonté en Italia.
Una vez restablecida la democracia en Chile, la actividad de Quilapayún se desarrolló desde entonces alternadamente en Europa y América.
LOS INTEGRANTES DE QUILAPAYUN
Eduardo Carrasco Pirard. Fundó el Quilapayún en 1965. Tiene 67 años, compositor musical, filósofo y poeta, es el creador más significativo del grupo, ha escrito gran parte de las partituras, textos y arreglos del Quilapayún. Su obra se extiende aún abarcando los terrenos de la educación, de la poesía y la filosofía, todo esto plasmado en una gran cantidad de libros y artículos como también numerosos trabajos en colaboración con intelectuales y artistas de gran prestigio. La calidad de su obra le ha valido la medalla de Chevalier dans l’ OrdreDes Arts et des Lettres otorgada por el Ministerio de la Cultura de Francia.
Carlos Quezada Salas, también de 67 años de edad, es otro de los pilares de Quilapayún. Miembro desde 1966, es decir practicamente desde los orígenes; tenor y percusionista, la voz de Carlos caracteriza fuertemente el sonido y la potencia vocal del grupo. Es el integrante más constante del Quilapayun, ausente solo en 27 ocasiones tiene el récord de haber participado en más de 2 mil conciertos.
Luis Hugo Lagos Vásquez. Tiene 57 años, ingresó al Quilapayún en 1971. Barítono tenor, toca todo tipo de instrumentos y es también compositor. Profesor de música en la Enseñanza Nacional Francesa, cursó estudios de Pedagogía Musical en el Conservatorio Nacional de Chile y siguió una formación de armonía en Francia. Es el responsable musical del grupo en gira por Francia y Europa.
Luis Hernán Gómez Larenas. 
Tiene 62 años, es miembro de Quilapayún desde 1968. Barítono bajo. Espontáneo y comunicativo tiene a su cargo el contacto directo con el público durante el concierto.
Después de Carlos, es el integrante más asiduo, con cerca de 2 mil espectáculos en 40años de pertenencia al conjunto. Fuera del escenario es responsable de las relaciones y de las tareas administrativas del grupo en Europa.
Guillermo Julio García Campos. Tiene 56 años miembro del Quilapayún desde 1972. Barítono tenor, la calidad del timbre de su voz ha marcado el sonido del conjunto en los últimos treinta años. Profesor de música en la Enseñanza Nacional Belga ha comenzado a hacer sus armas en tanto compositor. Se desempeña también como animador de un taller de música en Bruselas dirigido hacia jóvenes liceanos inmigrados.
Ricardo Elías Venegas Carhart. Tiene 59 años, ha pasado a ser una pieza importantísima en el funcionamiento musical interno. Conocedor al detalle de las partituras del grupo se encarga de las relaciones con músicos acompañantes y de supervisar las grabaciones. Colaborador desde 1972, se integra al grupo en exilio en 1979 y vuelve a Chile en 1991. Músico autodidacta y entusiasta ha desarrollado una intensa labor de difusión de la música del Quilapayún, creando y aconsejando a grupos juveniles en diversas ciudades de Chile.
Rubén Escudero Pinto. Tiene 60 años. Figura central del grupo durante los años 70 se había retirado de los escenarios y ha vuelto hoy a apoyar la actividad de Quilapayún principalmente en Chile y Sudamérica.
Una mención especial merece Guillermo (Willy) Oddó Parraguez, quien fue asesinado en 1991, en Santiago, a la edad de 49 años. Se había integrado al conjunto en 1967. Barítono tenor de gran calidad su voz y su carisma contribuyeron a establecer la identidad y la notoriedad de Quilapayún. Los públicos de diferentes países lo recuerdan y aplauden aún su nombre. Fue y seguirá siendo la figura más popular de los Quilas.
LA JOVEN GUARDIA
Ismael Oddó Mendez. Tiene 32 años, es el benjamín del grupo. Hijo de Willy Oddo y de la bailarina Rayén Mendez, Ismael es un artista completo. Egresado de la Escuela de Música de la SCD (Sociedad del Derecho de Autor de Chile) se integró a Quilapayún en el 2003. Armonizador y compositor de talento Ismael es a la vez germen de renovación de la obra y de la perennidad de los auténticos valores del Quilapayún.
Sebastian Quezada Perez. Sebastian tiene 34 años y posee un sólido bagaje musical iniciado este desde niño en el conservatorio de Gennevilliers en Francia, pasando por orquestas sinfónicas juveniles y coros. Hijo de Carlos Quezada se incorporó al Quilapayún en 2004. Ha acompañado artistas de renombre en Francia y en giras internacionales. Percusionista especializado en los ritmos afro cubanos, incursiona igualmente en la composición. Su aporte cualitativo ha sido importantísimo.
DISTINCIONES
1966 Primer premio Festival de Festivales. Viña del Mar Chile.
1969 Primer Premio del Festival de la Nueva Canción Chilena en compañía de Víctor Jara. Santiago de Chile.
1970 Mejor Conjunto Nacional. Premio otorgado por La Asociación de Periodistas del Espectáculo de Chile.
1974 Premio de la Academia Charles Cros, París.
1979 Medalla de Honor de la ciudad de Detroit.
1994 Distinción otorgada por la Organización de Estados Americanos y el Consejo Interamericano de la Música. Washington DC.
1995 Medalla Gabriela Mistral otorgada por el Ministerio de Educación de Chile.
2005 Medalla de Honor de la Ciudad de Quito.
2007 Medalla de Chevalier des Arts et des Lettres otorgada por el Ministerio de la Cultura de Francia a Eduardo Carrasco.
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16/6/08
La poderosa presencia de Quilapayún en México
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1 comentarios:
orgullosa de nuestros quila,orgullosa del canto chileno,me encanta su armonizacion,la mistica,como expresan en cada una de sus canciones,una de mis piezas favoritas es el canto de la cuculi.... es inmensamente mistica.
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