La hiperhidrosis, una enfermedad social

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Por Héctor Medina Varalta

“Es importante destacar que las personas no recurren al médico por vergüenza, esto sólo genera que a su problema no se le solucione de manera eficiente y oportuna”.

El 70 por ciento de las personas que padecen hiperhidrosis se sienten afectados en su interacción social. Un 26 por ciento de las personas se ha encontrado en alguna situación incómoda por culpa de su propio sudor

Las altas temperaturas provocan que el cuerpo sude, incluso, el estar bien abrigado en invierno también provoca sudoración. En algunos casos se puede considerar normal, pero existe un trastorno conocido como hiperhidrosis que se da por el sudor excesivo de este líquido en diferentes partes del cuerpo como axilas, cara, palmas de las manos y las plantas de los pies. La Sociedad Internacional de Hiperhidrosis registra que el 3% de la población la padece este trastorno; cabe mencionar que el porcentaje es mayor pero no existe un registro ya que las personas consideran que es una condición normal, la cual asocian con la falta de higiene y descuido; es por ello que el 70% de las personas que padecen hiperhidrosis se sienten afectados en su interacción social.

Causa incomodidad

El Dr. Gregorio Adame Miranda, médico cirujano y dermatólogo asegura que, la hiperhidrosis por lo general, aparece en la adolescencia pero también puede presentarse en niños. Esta enfermedad ha tomado últimamente importancia, sobre todo por la aparición de nuevos tratamientos para el manejo de este problema. En términos generales se puede decir, que la sudoración es superior y anormal. Todos sudamos, pero cuando sudamos exageradamente se puede decir que tenemos hiperhidrosis. Adame asegura que, el impacto de la hiperhidrosis en la calidad de vida se da de manera negativa provocando una disminución en las actividades diarias así como en la relación con otras personas. El 74 por ciento de los mexicanos se han sentido molestos por el sudor de otras personas; mientras que un 26 por ciento se ha encontrado en alguna situación incomoda provocada por su propio sudor.

Manifestación de la hiperhidrosis

Cuando una persona moja en exceso la ropa en el área de las axilas principalmente, personas que al saludar mojan la mano de su interlocutor, que le “llora” la mano porque todo lo que tocan humedecen o personas que echan a perder los zapatos debido al exceso de sudor y que, además, produce mal olor. Son personas que requieren ayuda, ellos deben saber que lo que padecen no es algo natural, es algo que se sale de los parámetros de normalidad y que existen médicos dermatólogos quienes se encargan de manejar el problema del exceso de sudoración. Existe el conocimiento de la hiperhidrosis entre la comunidad médica, lo que sucede es que tal vez no existe el conocimiento a profundidad de cómo hacer la evaluación para definir si un paciente cursa con una hiperhidrosis o es una sudoración normal.

Canalizando al paciente

Existe la prueba de Minor que realizan los dermatólogos, está prueba permite ver lo sitios y el grado de sudoración que presenta una persona, y en base a esta prueba poder decidir que tratamientos se pueden sugerir al paciente. Los médicos saben que existe la hiperhidrosis, más no todos saben como evaluarla; hay médicos como los neurocirujanos que también LA manejan, pero habitualmente los pacientes llegan a ellos referidos por un dermatólogo. Es decir, cuando éstos últimos decidieron que los tratamientos con los que cuentan para quitar el problema no son suficientes, entonces canalizan al paciente con el neurocirujano para que le practique una cirugía en la columna y le disminuya la sudoración.

La mejor opción dermatológica

Para el control de la hiperhidrosis, se recomienda la aplicación de Botox, el cual ayuda a paralizar los nervios que estimulan las glándulas sudoríparas. La aplicación de la sustancia butolínica actúa relajando las glándulas sudoríparas de manera segura, logrando que disminuya la producción excesiva de sudor. La aplicación de la toxina botulínica tipo A, permite a la persona solucionar su problema de manera casi instantánea; el 92 por ciento de las personas tratadas con Botox están satisfechas con el resultado del tratamiento; la FDA (Food and Drugs Administation) aprobó el uso de este medicamento para tratar la hiperhidrosis”. El tratamiento dura entre 8 meses y un año, el paciente puede correr, bailar, jugar fútbol sin ninguna preocupación.

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