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Por: Héctor Medina Varalta
En el 2005, la cifra de estadounidenses con obesidad severa fue un 50 por ciento más alto en relación con el año 2000, y su número crece, pese al incremento de la cirugía bariátrica, para reducir la capacidad del estómago. Un estudio de la relación entre altura y peso, índice de masa corporal (IMC), informada por los propios pacientes, mostró que el tres por ciento de los estadounidenses, cifra equivalente a 6,8 millones de personas, sufre obesidad grave. Por otra parte, la Dra. Silvia de Lourdes Orozco Aviña, Presidenta de la Zona de la Dieta en México y directora del Instituto de Inflamación, asegura que la obesidad mórbida pone en riesgo la calidad vida, pero sobre todo, el hecho de que esa persona puede morir es lo más impactante. La obesidad mórbida está incrementando día con día en nuestro país y en los Estados Unidos, sin embargo, lo más alarmante no es que sólo se está incrementado la obesidad mórbida en México, sino que también está incrementado en la población infantil y en los adolescentes.
El hombre más obeso del mundo
La Dra. Orozco asegura que cuando conoció a Manuel Uribe Garza, considerado como el hombre más obeso del mundo ganador del Record Guiness, algo no muy grato para él, pero también ganó el Record Guiness del siguiente año, como el hombre que más ha bajado peso sin cirugía. Orozco trabajó la problemática de Manuel Uribe, que no sólo estaba considerado como el hombre más obeso del mundo sino que también como el más sano, porque al realizar los exámenes de laboratorio: azúcar, colesterol, triglicéridos, presión arterial, tiroides y todo salía perfectamente normal. Médicos y nutriólogos de Estados Unidos, japoneses, alemanes, italianos, españoles y mexicanos habían intentado ayudar a que Manuel bajara de peso (cerca de 600 kilos); hace año y medio que Orozco y su equipo de expertos lo conocieron y empezaron a tratarlo.
El enigma médico
“Lo que tratamos de decirle a Manuel-enfatiza Orozco-es que si demostrábamos científicamente en un examen de sangre que mide la inflamación silenciosa celular y si se apegaría a las recomendaciones que le daríamos y él aceptó, pues tenía la inquietud de saber por qué padecía esa obesidad mórbida y, paradójicamente era el obeso más sano del mundo”. Todos los médicos que le habían dado dietas y medicamentos para bajar de peso; y la última propuesta del Dr. Jean Carlo Bernadette era llevárselo a Italia para hacerle la cirugía bariátrica, propuesta que a la Dra. Orozco, al Dr. Gustavo Orozco, director médico del Instituto de Inflamación y a Javier Pini, instructor físico de Manuel les pareció muy peligrosa. La propuesta de Orozco fue que, en vez de que se hiciera la cirugía bariátrica para resolver el problema de obesidad, se le midiera su nivel de inflamación celular que es lo más reciente que se conoce como la causa de la obesidad y de la obesidad mórbida.
Nivel de la sangre
La obesidad mórbida es una inflamación celular que está silenciosa durante muchos años; antes de que la persona suba siquiera 10 kilos de peso ya tiene inflamación celular y lo ignora. Se sabe que esa inflamación celular es la que enciende o activa los genes de la obesidad. Manuel los tiene, los activó y expresó sus genes de la obesidad mórbida a través de la inflamación celular. El examen de sangre de inflamación celular tiene un número normal que es de 1.5 como la sangre de los japoneses que viven en la región de Okinawa donde se consume mucho pescado, muchas frutas y muchas verduras; o sea el programa nutricional que se lleva en la Zona. Orozco le dijo que lo iban a dejar libre para que se lo lleven a operar a Italia porque no sabía las causas, pero si el nivel de sangre de Manuel es de más de 1.5 en la sangre, entonces se empezaría el tratamiento de la zona, que es el tratamiento para la inflamación celular. Después de un mes recibieron la muestra de sangre de Manuel (hace año y medio), todos quedaron atónitos porque el nivel era de 28.
Causas
Por primera vez se pudo demostrar en un papel lo que le pasaba a Manuel; cuando éste ve el examen de laboratorio, preguntó que era eso y cómo se trata. “Quiero compartir-enfatiza Orozco- con las lectoras de Ocho Columnas lo que mencioné a Manuel; la gente quiere tratar la obesidad, reduciendo calorías, haciendo ejercicio y tomando medicamentos extraños, pero sabemos que no es el camino para resolver la obesidad porque no cura la obesidad ni la obesidad mórbida desde su raíz u origen. Ahora se sabe que la obesidad comienza con una inflamación celular y qué ésta se debe a una enfermedad carencial. Es decir, a las células les falta nutrientes esenciales muy importantes que el cuerpo ya no los produce porque los hemos perdido de generación tras generación.
Si se puede 
Manuel bajó 200 kilos, pero su problema es que no se puede parar porque aparte de su obesidad tiene dos linfedemas (tumores) en las piernas; hace cinco años tenía un tumor en la pierna derecha que pesaba 50 kilos, pero un cirujano se lo cortó, le quitó 80 kilos de grasa del abdomen, pero la inflamación se hizo tres veces más grande. Manuel pesaba 300 kilos cuando le hicieron la cirugía, fue un caso de yatrogenia (daño causado por el médico), cuando le quitó el tumor sin controlar la inflamación, salió otra vez en la otra pierna. Aparte de los casi 600 Kilos que Manuel pesaba, cada tumor pesaba 100 kilos. En la actualidad, es increíble ver como Manuel a evolucionado a través de los cinco pasos y sin ninguna cirugía costosa y sus tumores pesan 50 kilos cada uno. “Manuel-concluye Orozco- se va a parar de esa cama donde a estado 6 largos años y será un gran testimonio, pues tenemos la intención de presentar al mundo el próximo año a un Manuel nuevo. El examen antiinflamatorio le salvó la vida a Manuel quien tenía tres intentos de suicidio, pues por más dieta que hacia no lograba perder peso, al contrario lo subía Si el hombre más obeso del mundo puede perder peso sin cirugía, cualquiera puede hacerlo”.
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8/2/10
Obesidad Mórbida
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