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Según la ONU una de cada tres mujeres en el planeta es violentada de alguna forma, eso significa un billón de mujeres cada día y minuto sufriendo.
Por Héctor Medina Varalta
Hace muchos años imperaba en mi vida un desorden espantoso. Yo no sabía si tenía novio o no, no sabía cuánto dinero ganaba, mi trabajo y mi salud eran muy intermitentes. Por esa razón, vivía con mucha frustración, con muchas prisas, tuve que parar, porque además vivía muy triste y muy enojada, y tuve que pedir ayuda. Ésta siempre llega cuando uno está disidido a ser ayudado, la ayuda me llegó de la gran psicoterapeuta Martha de Lope, que después fue mi maestra y que después me guió hacia el camino de la psicoterapia y tuve que emprender el camino de realizar uno por uno los aspectos de mi vida: perdonar, resolver, entender, aceptar y sacar brillo a dos o tres cualidades que tenía, negándolas que las tenía. Ese fue el proceso en el cual limpié mi armario interior y esa es la invitación que he venido hacerles esta mañana. Por lo tanto, les propongo que hagamos cada una la revisión de nuestro armario interior, ya sea físico, psicológico o emocional dónde vamos guardando todo lo que nos ha ido pasando en la vida y eso ha ido deteniendo nuestra personalidad; no tienes que tener una crisis como la mía para empezar a hacerlo. De hecho, mucho mejor si no estás en crisis.
¡A la basura las prendas emocionales!
En la existencia de todas nosotras hay eventos significativos que determinan la persona que hoy somos, por ejemplo, todo lo que nos pasó en la casa en la que vivimos cuando éramos niñas, sin embargo, algunas veces dejamos algunos temas sin revisar o algunas cosas pendientes, por ejemplo, cuando llegamos de la escuela a la casa y escuchamos por primera vez gritar como loco a nuestro papá o todavía no encontramos el momento de darle las gracias a nuestra mamá por algo que hizo por nosotras. En fin, todas estas evidencias van formando, a las que llamo "prendas emocionales o espirituales," son prendas que si no las revisamos; hagan de cuenta que es ese suéter, pero tenemos 40 años y nos lo seguimos poniendo. Más aún, decimos "pero si es mi suéter, cómo lo voy a tira a la basura." Es un acto inconsciente. Estamos hablando de estos temas para no ir arrastrando dobladillos emocionales del pasado que ya no nos quedan. También a veces decretamos "yo no merezco", "yo no puedo", "no soy lo suficientemente buena" o "a mi edad ya no puedo hacer tantas cosas".
Saca de tu estuche interior los diamantes divinos
Poco después, Aurora del Villar pidió a su auditorio que se imaginara caminando por un bosque muy hermoso que conduce a un castillo, en el que se adentraron a una habitación muy particular, que es la alcoba de cada una de las féminas ahí reunidas.
Acércate, ábrelo-subraya-, hoy vas a hacer limpieza. Ahí adentro se encuentra todo lo que nos ha pasado en la vida. Así que respira profundo y después échate un clavado a tu armario y descubre sí te quieres a ti, a tu cuerpo, lo suficiente cómo para darle alimento, descanso, ejercicio, trabajo y diversión de manera equilibrada, o no te gusta. Te tengo una noticia, en esos estuches se encuentra tu alma que necesita un cuerpo para tener las experiencias que necesita conquistar en la Tierra. Lastimar al cuerpo haciendo cuenta que no existe: no comer, darle sólo café, no acudir con el médico, que el último papanicolau fue antes del último parto y del dentista ni qué decir o al revés torturarlo con lechuga y jitomate por todo alimento, exigiéndole perfección.
La palabra es un agente creativo muy poderoso, ¿con cuántos adjetivos feos maltratas a tu cuerpo? "Guanga", "gorda", "mensa", "lonjuda", "flaca", "plana", "vieja", pero eso no es útil para el desarrollo personal, ni espiritual, eso hace mucho daño. Lo que sirve para el desarrollo del cuerpo es formar al cuerpo como está.
En seguida, Aurora del Villar mostró dos estuches; el primero muy bonito, al parecer su dueña lo cuida mucho, el otro apenas conserva la forma de estuche, sin embargo, en ambos estuches había diamantes. Es una forma de decir qué adentro de tu cuerpo están los diamantes de tu alma listos para brillar, esperando que les des la oportunidad de irradiar toda su luz, no importa si tu cuerpo es tratado con amor o no, los diamantes están adentro. Así que más vale tratar al cuerpo con cariño, respeto y amor. Pero muchos caemos en la actitud súper adolescente de que nuestro cuerpo nos va a durar para siempre.
Abriendo el cajón de la ropa interior
No importa cómo es tu lencería, si no puedes encender en tu interior la flama que lleva a la fusión con el otro, si pones rígido tu corazón y lo separas de esa fusión, te estás privando del acto más saludable e integrador de dos personas que se aman; la fusión psíquica, emocional y sexual. La fusión sexual no es otra cosa más que energía de vida, creatividad y un vehículo para contactar con la optimidad. De acuerdo a los especialistas, una persona sexualmente sana tiene entre 8 y 12 orgasmos al mes, más es ser golosas. Que nadie les cuente que una mujer que libera su energía sexual, se va a convertir en una loquita comedora de hombres, y si quiere es su decisión mientras se cuide. Solo se va a volver una mujer más segura, más creativa y más satisfecha de sí misma, porque la sexualidad es un tipo de energía que viene con la bendición de estar vivos, y sólo por eso debemos considerarla sagrada. Es muy fácil, si a Dios no le gustara que juegues, no te hubiera dado juguetes. Cuando logremos entenderlo, las mujeres mexicanas vamos a dejar de ocupar el Segundo Lugar Mundial de Mujeres que Viven Estresadas.
Área del dinero
Las mujeres árabes bailan, no para seducir a los hombres, las bailan entre ellas. Como se sabe, las mujeres árabes viven en un entorno mucho más agresivo que el que habitamos nosotras. Aquí tenemos mucha más libertad. Poco después, las mujeres que se encontraban en el auditorio Telmex empezaron a bailar una danza árabe; al terminar del Villar abordó el tema del dinero.
Parece increíble, pero muchas mujeres alcanzan la edad madura sin tener una economía eficiente. Tal vez en nuestras casas nos enseñaron a cuidar el dinero de los demás, pero no para tener el nuestro o nos dijeron que el dinero hace muy malvadas y arrogantes a las personas. Mira, para que puedas realizar este tema con la profundidad que se merece, está bueno que reflexiones lo que te enseñaron sobre cómo se manejaba el dinero en tu casa. ¿Qué hacía tu papá? ¿Era abierto con sus cuentas o nadie ni tu mamá lo sabía? Toda la historia de ese género te va a ayudar mucho a revivir tus viejos recuerdos y a ayudar mucho tu relación con el dinero. Tener conocimiento sobre esta forma de energía, nos va a ayudar a conectarnos con ella; no hay ninguna razón para que no puedas tener todo el dinero que necesitas para vivir cómoda y tranquila. Es erróneo creer que ser espiritual es estar peleado con el dinero o que una mujer no puede tener ambiciones, metas económicas o el pensamiento de que al dinero hay que tenerle miedo. No importa si tienes 20 o 45 años, ya no estamos en edad de que nos mantengan, porque el mundo ya no es para mujeres dependientes. Estamos en la nueva era de las mujeres, vamos a seguir siendo femeninas y sensibles, pero al mismo tiempo vamos a ser productivas y autosuficientes. Así vamos a estar listas para encontrarnos con hombres que no tengan miedo del poder femenino, pues estos hombres sí existen. Para hacer esto hay que arreglar el armario, pero es una tarea personal: tú no lo puedes hacer por nadie, ni nadie lo puede hacer por ti. De los hombres lo que necesitamos es el amor, la compañía, la comprensión. En todo armario que se respete hay un lugar donde se guardan los afectos-concluyó.
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