La Cineteca Nacional inaugura ciclo sobre la figura femenina vista por Mizoguchi
Prostitución, inequidad de género y frustración, forman parte de las complejas situaciones por las que atraviesan las mujeres en el cine de Kenji Mizoguchi, director que filmó alrededor de 100 películas, en las cuales retrató aquellas convenciones sociales de la sociedad japonesa que obstaculizaron el camino hacia una liberación femenina. Con el fin de mostrar una de las etapas más importantes del cineasta japonés, la Cineteca Nacional presenta el ciclo "La mujer en el cine de Kenji Mizoguchi" que se realizará del 2 al 23 de octubre en las salas Arcady Boytler y Juan Bustillo Oro. El programa integra 14 filmes que van de 1947 al año en que dirigió su última película, 1956. Asimismo, se incluye un documental dirigido por Kaneto Shindô que muestra la vida del director originario de Tokio. El ciclo abre con El amor de Sumako, la actriz (Joyû Sumako no koi, Japón, 1947), película que relata la historia de Shimimura y Sumako. Él es un dramaturgo que busca separarse de la tradición Kabuki e incursionar en Ibsen y otros clásicos europeos. Ella, una actriz que da vida a Nora en la obra Casa de muñecas de Henrik Ibsen. Ambos lucharán por su amor y su proyecto teatral aún en contra de la familia y las convenciones sociales. La cinta fue galardonada con el premio a la mejor actriz en el Mainichi Film Concours de 1948, por el papel de Kekkon (Kinuyo Tanaka). En ese concurso, otra cinta por la que resultó premiada la actuación de Kinuyo Takana fue Mujeres de la noche (Yoru no onnatachi, Japón, 1948). Aquí, dos hermanas se introducen en la prostitución en el marco del caos moral y la devastación del Japón de la posguerra. Inspirado por las experiencias del neorrealismo italiano, Kenji Mizoguchi consiguió uno de los filmes más desgarradores de su carrera, grabado en locaciones auténticas de Osaka y con una vocación realista exacerbada. La tercera cinta de la época de los 40 que forma parte del programa es Amor en llamas (Waga koi wa moenu, Japón, 1949). El guión corre a cargo de Kaneto Shindô y Yoshikata Yoda, quienes se basaron en la novela de Kôgo Noda. Este melodrama, que resalta la crueldad, el dolor y la fe, muestra cómo Eiko, una mujer que busca la igualdad de géneros, viaja a Tokio para unirse al Partido de Liberación de la Mujer, donde conoce y se enamora del líder del organismo. Tras un incendio por el que son encarcelados injustamente, la protagonista conocerá la verdadera cara de los luchadores del feminismo. La historia está ambientada en la Era Meiji y producida durante la posguerra inmediata.Reflejando una postura a favor de la liberación femenina, a través del estilo sobrio y contemplativo que caracterizaba a Mizoguchi, El retrato de la señora Yuki (Yuki fujin ezu, Japón, 1950) muestra a una mujer casada con un hombre despreciable que la humilla y despilfarra su fortuna familiar. Cansada, decide abandonarlo alentada por el hombre a quien ama. Sin embargo, su decisión desatará grandes desventuras. En 94 minutos, Mizoguchi consigue hacer brotar las emociones más dolorosas en La señorita Oyû (Oyû-sama, Japón, 1951), que relata el dilema en el cual entra Oyû, una madre viuda que tiene el deber de sacar a su hijo adelante dejando de lado cualquier interés por rehacer su vida. Continuando con el guión a cargo de Yoshikata Yoda, quien en esta ocasión se inspira en una novela de Shōhei Ōoka, La dama de Musashino (Mushashino fujin, Japón, 1951) narra la triste historia de una mujer perteneciente a un milenario linaje de samuráis. Ambientada en los años posteriores a la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial, la protagonista se enfrenta a un doloroso dilema cuando queda expuesta a una pasión prohibida que pone en riesgo la honorabilidad de su clan, para el cual la modernidad parece no existir. Los reconocimientos a la obra de Kenji Mizoguchi continuaron en la década de los 50 en el Festival de Venecia, donde el director ganó el Gran Premio del Jurado y fue nominado al León de Oro por Mejor Película. Tales galardones derivaron de su trabajo en La vida de Oharu (Aikaku ichidai onna, Japón, 1952). En esta cinta, Oharu, avejentada y sobreviviendo lastimeramente como prostituta callejera ingresa a un templo religioso donde recuerda su pasado amoroso y laboral determinado por la adversidad y la tragedia. Con un soberbio manejo de exteriores y una narración que eslabona firmemente los elementos melodramáticos, Mizoguchi logra una de sus mejores cintas sobre la temática de geishas. En la película nominada al Óscar por mejor diseño de vestuario en 1956, Cuentos de la luna vaga después de la lluvia (Ugetsu monogatari, Japón, 1953), Mizoguchi reúne dos relatos sobrenaturales ubicados en el siglo XVI, durante una cruenta guerra civil. Elegantes planos secuencia y una fantasmal atmósfera son el marco historia, en la cual un alfarero es seducido por una dama espectral. El filme es considerado entre los mejores de la historia del cine, por el que Mizoguchi obtuvo el León de Plata a la mejor dirección en el Festival de Venecia de 1953. En Japón, durante el siglo XVII se acostumbraba castigar el adulterio crucificando a los amantes públicamente. En Los amantes crucificados (Chikamatsu monogatari, Japón, 1954), los protagonistas inician una relación clandestina impulsada por la codicia del marido de ella y patrón de él. Una vez descubierto su amorío, ambos huyen sin rumbo, tratando de escapar del rechazo social. Filmada en la madurez de Mizoguchi, destaca el manejo del plano secuencia para crear intensidad dramática. Con este trabajo el autor ganó el premio al mejor director en el Blue Ribbon Awards 1955, asimismo, fue nominado en el Festival de Cannes en 1955. En 1954 Kenji Mizoguchi y la actriz Kinuyo Tanaka orquestaron una dolorosa cinta sobre lo implacable del paso del tiempo, centrándose en la forma como éste afecta en particular la vida de las mujeres, tanto en el plano íntimo como en el social. Una mujer de rumores (Uwasa no onna, Japón, 1954) narra la historia de una viuda, empresaria en el distrito de las geishas de Tokio, quien se dispone a vivir con un médico al que ama. Sin embargo, el regreso de su hija, quien desprecia su forma de vida, complicará sus planes. Considerada su última gran obra, La emperatriz Yang Kwei-fei (Yôhiki, Japón, 1955) expone a un emperador chino, incapaz de superar la muerte de su esposa. Sin embargo, se enamora e inicia un romance con una plebeya, momento en el cual las intrigas palaciegas y la envidia que provoca su felicidad tornan trágica la situación. En esta ocasión, el cineasta explota al máximo su deslumbrante fotografía en color y presenta una exquisita escenografía que remite a la China imperial. El último filme de Kenji Mizoguchi, La calle de la vergüenza (Akasen chitai, Japón, 1956), es una lección de sabiduría cinematográfica en la cual la vocación realista del director no es un obstáculo para la emotividad. Los sueños de las prostitutas de un burdel ubicado en la zona roja de Tokio se ven continuamente destrozados por la sordidez de la realidad que les rodea. La cinta tuvo su estreno poco después de la promulgación de una ley antiprostitución, lo que provocó un inmenso éxito de esta pieza. Kaneto Shindô, director de clásicos del cine japonés como Onibaba (1964) y Kuroneko (1968), es el cineasta detrás del documentalKenji Mizoguchi: la vida de un director de cine (Aru eiga-kantoku no shogai, Japón, 1975), sobre la obra, la vida y los tiempos del artista, evocados a través de los testimonios de algunos de sus colaboradores más cercanos, como el guionista Yoshikata Yoda o su actriz predilecta, Kinuyo Tanaka. Es así que Cineteca Nacional retoma la obra de uno de los directores fundamentales de la cinematografía mundial, a través de este ciclo que refleja la urgencia de resonancias universales que convierten a las mujeres de Mizoguchi en ciudadanas del mundo entero, ansiosas de felicidad, independencia, amor y equidad.
Ciclo Kenji Mizoguchi Programación sujeta a cambios de último momento Sala 4, Arcady Boytler
Jueves 2 de octubre El amor de Sumako, la actriz 19:30
Viernes 3 de octubre Mujeres de la noche 19:30 Amor en llamas 21:30
Sábado 4 de octubre El retrato de la señora Yuki 19:30 La señorita Oyu 21:30
Domingo 5 de octubre La dama de Musashino 19:00 La vida de Oharu, mujer galante 21:00
Jueves 9 de octubre Los amantes crucificados 19:30
Sábado 11 de octubre La calle de la vergüenza 19:00 Kenji Mizoguchi, la vida de un director de cine 21:00
Domingo 12 de octubre El amor de Sumako, la actriz 19:00 Mujeres de la noche 21:00
Martes 14 de octubre Amor en llamas 19:30
Jueves 16 de octubre La señorita Oyu 19:30
Viernes 17 de octubre La dama de Musashino 19:00 La vida de Oharu, mujer galante 21:00
Sábado 18 de octubre Cuentos de la luna vaga después de la lluvia 19:30 Los músicos de Gion 21:30
Domingo 19 de octubre Los amantes crucificados 19:00 Una mujer de rumores 21:00
Jueves 23 de octubre Kenji Mizoguchi, la vida de un director de cine 19:30
Ciclo Kenji Mizoguchi Programación sujeta a cambios de último momento Sala 9, Juan Bustillo Oro
Martes 7 de octubre Cuentos de la luna vaga después de la lluvia 19:30
Miércoles 8 de octubre Los músicos de Gion 19:30
Viernes 10 de octubre Una mujer de rumores 19:30 La emperatriz Yang Kwei Fei 21:30
Miércoles 15 de octubre El retrato de la señora Yuki 19:30
Martes 21 de octubre La emperatriz Yang Kwei Fei 19:30
Miércoles 22 de octubre La calle de la vergüenza 19:30
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2/10/14
La Cineteca Nacional inaugura ciclo sobre la figura femenina vista por Mizoguchi
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