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A punto de cumplir su tercer aniversario, la Revista mexicana Open, presenta en su portada de noviembre a Alfonso Herrera.
Después de participar en varios castings, Alfonso comenzó su carrera como actor en el teatro; fueron las obras Las Brujas de Salem, Cómo matar a un ruiseñor y Antífona, las que le otorgaron las tablas suficientes para saltar al cine.
Amar te Duele, dirigida por Fernando Sariñana, fue su primera incursión en el séptimo arte y, desde entonces, sus proyectos han ido ligados uno detrás del otro. Habiendo pasado por el cine y el teatro, Alfonso fue requerido para participar en la telenovela Clase 406, invitado por el productor Pedro Damián; quien también lo reclutó para su siguiente proyecto juvenil, la telenovela Rebelde.
Poco a poco fueron acomodándose los proyectos en los que ha estado involucrado; hasta que hoy, después de cuatro años, continúa apasionado y disfruta de cada uno de ellos como si se tratara de la primera vez, bajo la filosofía de tomar su trabajo con diversión.
“No voy a ser solista” dice abiertamente ‘Poncho’, quien tuvo que tomar clases de canto frente a la responsabilidad en el proyecto RBD al cual considera como un regalo. “No me veo como cantante.”
Alfonso no se toma las cosas a la ligera. “Mi trabajo lo tomo en serio, porque es mi sustento y mi credibilidad. Estoy enfocando toda mi atención a mi labor y trato de vivir el presente, intensamente y disfrutar lo que me toca y estoy viviendo, siempre con mucha tolerancia y respeto por los demás; si lo pudiéramos hacer así viviríamos un poquito más en paz.”
¿Cómo no marearte con tanto éxito? pregunta Open. “El chiste es no creértelo. Tener un trabajo como éste, no te hace mejor o peor. Es simplemente otra profesión. Es que la fama no existe. La gente te conoce como resultado de tu trabajo, igual que en todos los demás, y se agradece. Mi trabajo es como cualquier otro, y lo único que hago es disfrutarlo.”
Ahora, como actor, sus pretensiones son simples: actuar. “Tenemos que romper ciertos estereotipos; como el de que existe un actor de cine, otro de televisión y otro de teatro. En las telenovelas brasileñas hay excelentes actores que hacen cine, teatro y televisión y el único beneficiado es el público. En México hace falta eso, pero cada país se merece la televisión que tiene.”
Hay televisión bien hecha; se puede hacer televisión de calidad, “el chiste es pensar un poco y diversificarme, trabajar más y no quedarme muy cómodo en un lugar”, concluyó.
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13/11/08
Alfonso Herrera: “La fama no existe.”
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