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- El dirigente de la CIOAC, Federico Ovalle Vaquera, advirtió que con un presupuesto castigado se obliga al campo a retroceder más de lo soportable.
En las medidas adicionales que instrumentará el Gobierno Federal para enfrentar el choque financiero internacional y que en esta semana anunciará el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero, se ignora la crisis del medio rural y la problemática alimentaria del país.
Además, la administración federal ha propuesto un Presupuesto de Egresos 2012 para el campo mexicano con ajustes a la baja lo que pone en riesgo la producción de alimentos, empleo e ingreso.
El secretario general de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos, Federico Ovalle Vaquera, dijo que a pesar de este contexto el gobierno mexicano envió a la Cámara de Diputados su propuesta de criterios para 2012 donde se incluyen los montos para los programas del próximo año pero de nueva cuenta castigados y sin cambio de orientación con respecto al pasado lo que hace retroceder al campo.
A juicio del también diputado federal y dado el contexto nacional e internacional, es momento de modificar el modelo y la política agropecuaria ya que “México es más vulnerable en la medida en que no modifique su modelo de desarrollo”.
Sugirió, Federico Ovalle Vaquera, que se requiere en esta competencia internacional, acudir al modelo de los pequeños productores de alimentos y donde la lógica no es mercantil sino de sobrevivencia, de poder producir alimentos para vivir.
Al analizar la situación económica y financiera actual, el dirigente de la CIOAC comentó que aún cuando el Banco de México redujo su expectativa de crecimiento económico menos a lo registrado durante 2010 cuando se tuvo un crecimiento del 5.5 %, es decir se estaría creciendo 1.5% menos que el año pasado.
Lo anterior implica un año más complicado en cuanto a la generación de empleo, la capacidad de incrementar el consumo de las familias y la extensión de la pobreza en 2011.
Otro aspecto que hizo ver el Secretario General de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos, es el efecto negativo sobre las exportaciones.
La crisis tanto de EUA como la que presenta la UE se expresará como una crisis de demanda efectiva, ésta se reducirá en los Estados Unidos lo que podría afectar las exportaciones mexicanas, detalló.
Entre los productos que se pueden ver afectados están cerveza, jitomate y aguacate, entre otros dependiendo de que tanto se vean afectados estos consumos en la Unión Americana como producto de la contracción de la demanda efectiva de los consumidores norteamericanos, dijo.
Igualmente Federico Ovalle Vaquera expuso que la situación de la economía nacional no ha remontado el atraso en cuanto al crecimiento del empleo por lo que resulta ilusorio pensar que se crecerá a un ritmo del 4 % dado que habrá un incremento de la demanda interna por ello “la verdad es que la población no tendrá condiciones mejores para incrementar su demanda porque no es nada confiable que el empleo crezca”.
De acuerdo al Centro de Estudios Económicos del Sector Privado, de haber un crecimiento económico del 4% “la posibilidad de mantener crecimiento en la plantilla laboral formal se limitaría afectando su ritmo actual”.
En opinión del dirigente de la CIOAC si continúa la crisis de EUA y en la UE, contrario a la opinión del Ejecutivo Federal mexicano, habrá una mayor caída en la demanda de empleo.
Además un efecto colateral sería la caída de la demanda de empleo de mexicanos en los Estados Unidos de Norteamérica lo que implicará una caída de los ingresos de los connacionales en aquel país y una reducción de las remesas para México.
Igualmente llevaría a una contracción de la producción agrícola en áreas marginales donde los migrantes invierten sus remesas en nuestra nación pues no hay que olvidar que existen áreas de temporal y de riego con pequeños productores que dependen de esas remesas, consideró.
Ante este contexto de crisis Federico Ovalle Vaquera consideró que el Gobierno Federal debe reprogramar los programas prioritarios para el medio rural 2012.
En ese sentido la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas verá recortado su presupuesto para 2012 con respecto a este ejercicio en 1,945.6 millones de pesos al pasar de 9,433.0 millones de pesos a 7,487.4 millones de pesos propuesto por el Ejecutivo Federal.
También el programa de Desarrollo de Capacidades, Innovación Tecnológica y Extensionismo Rural que tuvo un presupuesto de 3,419.1 millones de pesos pasaría a tener, para el 2012, un monto de 3,321.4 millones de pesos que en términos reales es muy menor ya que, considerando una inflación del 4%, ese monto se reduciría a 3,119.6 millones de pesos.
En el caso del Programa de Proyectos de Infraestructura Económica de Carreteras Alimentadoras y Caminos Rurales, el monto que tenía este programa para 2011 de 14,770.4 millones de pesos se reduce a sólo 4,153.4 millones de pesos. Se reducen 10,617.0 millones de pesos.
Advirtió finalmente “este punto es un tema muy delicado, ya que la estabilidad en el campo es imprescindible cuando además de las presiones alimentarias y pérdidas notables de la soberanía alimentaria, se sumen caídas en los programas como los que estamos mencionando”.
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