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* El presidente de la Confederación Nacional de Agrupaciones de Comerciantes de Centros de Abasto, Ramón Chavira Campos, advirtió que esta situación afecta a productores y comercio tradicional.
(CODICS).- Cifras oficiales señalan que entre 2008 y 2010 la población en pobreza creció de 44.5% a 46.2%, lo que representa un incremento de 48.8 a 52.0 millones de personas; las importaciones de agroalimentos que hace nuestro país es de 43.4% y que existen 3 mil 906 tiendas de autoservicio que aplican prácticas depredadoras en daño del comercio tradicional, lo que demuestra el olvido en que se tiene a los sectores agropecuario y comercial en México.Por lo anterior, el presidente de la Confederación Nacional de Agrupaciones de Comerciantes de Centros de Abasto, Ramón Chavira Campos, hizo un llamado al Gobierno Federal, a los gobiernos estatales y a las autoridades municipales, a rescatar a la cadena productiva y alimentaria a fin de revertir la creciente dependencia del exterior.
Al inaugurar la Convención y Asamblea Nacional Ordinaria de CONACCA denominada “Agricultura, Comercio y Alimentación” en el estado de Jalisco, destacó la problemática apremiante y prevaleciente en la Red Nacional de Centrales de Abasto; el presente y futuro de los productores del campo y la producción agropecuaria, así como el incremento de los precios y el hambre en la esfera doméstica y mundial.
El dirigente de 92 mil comerciantes, coincidió con la afirmación de que “no habrá paz en el mundo mientras haya mil millones de seres humanos en condiciones de hambre” y recordó que tan sólo en México, de acuerdo al Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), entre 2008 y 2010 la pobreza alimentaria pasó de 18.4% (20.2 millones de personas) a 18.8% (21.2 millones de personas), por lo que se debe fortalecer la agricultura, a los productores y al sector comercio.
Por ello, dijo que la CONACCA impulsará el respeto al derecho a la alimentación y la aplicación de políticas públicas para el rescate y modernización del comercio tradicional, desde las tienditas de barrio hasta las Centrales de Abasto, para quienes la competencia, con los “formatos modernos”, es real.
En esa lucha, las Centrales de Abasto no pueden ir solas, para asumir su papel como entes fuertes y organizados, necesitan el respaldo y apoyo de sus cabezas de sector en las secretarías de Estado correspondientes, con programas integrales y eficientes, así como simplificados y accesibles.
Ramón Chavira Campos consideró que los apoyos gubernamentales, conjuntamente con los de la iniciativa privada, encaminados al rescate y modernización del comercio tradicional, son la única manera de garantizar el acceso del pueblo a una alimentación sana, suficiente y en las mejores condiciones de precio, calidad y frescura ya que el mismo CONEVAL indica que una Canasta Básica Alimentaria Rural está en $701.05 pesos mensuales mientras que la Canasta Básica Alimentaria Urbana se ubica en $1006.53 pesos mensualmente.
Por lo que respecta al ámbito fiscal, sostuvo que las Centrales de Abasto necesitan un “traje a la medida” porque son la principal fuente de empleo con más de 1 millón 850 mil puestos de trabajo directos e ingresos para los pequeños y medianos productores ya que distribuyen el 70% de la producción agropecuaria y pesquera, pero las disposiciones fiscales actuales han dañado la relación entre comerciantes y productores dejando a los comerciantes en una grave incertidumbre jurídica.
Ramón Chavira Campos, Presidente de CONACCA, señaló que las ventas anuales de las Centrales de Abasto ascienden a 350 mil millones, por lo que se requiere una mayor sensibilización y reconocimiento a la labor de abasto y alimentación de este sector por parte de las secretarías de Desarrollo Económico de los gobiernos de los Estados, además de que es urgente que los municipios presten los servicios públicos para fortalecer la vinculación de los agentes que integran la cadena productiva.
Por lo anterior, reiteró el llamado a los tres niveles de gobierno para concretar políticas públicas que garanticen el acceso del consumidor final a una alimentación suficiente, sana y en las mejores condiciones de precio, calidad y frescura, ofreciéndose a través de los formatos tradicionales.
Demandamos “se controle la instalación de tiendas de autoservicio, se sancionen las prácticas depredadoras de las multinacionales y se vigile permanentemente la equidad y el ejercicio de las Buenas Prácticas Comerciales” ya que la misma Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales reporta la existencia de 27,313 tiendas entre Autoservicio, Departamentales y Especializadas, con ventas en el periodo Enero-Junio de 2011, superiores a los $449 mil millones de pesos.
El presidente de CONACCA reiteró que no son las trasnacionales quienes deben garantizar el derecho a la alimentación como lo muestra el incremento de las importaciones agroalimentarias durante este año que crecieron a un ritmo de 25% a tasa anual de acuerdo a reportes de la Subsecretaría de Fomento a los Agronegocios de la Sagarpa.
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