Morelia, Michoacán a 26 de Noviembre de 21.- En este último día de actividades, el XXIII Festival de Música de Morelia trajo para deleite de todos los melómanos a uno de los jazzistas actuales más relevantes, Beat Kaestli. Concierto que se llevó acabo en Palacio Municipal y que comenzó poco después de las 13:00 horas.
Beat es un músico suizo que desde 1993 ha vivido en New York, en donde ha podido conocer, convivir y trabajar con algunos de los mejores jazzistas, como Jane Monheit, Jason Moran y Stefon Harris. También ha tenido contactos con importantes músicos de jazz nacionales como Magos Herrera y Eugenio Toussaint; y se ha presentado en el Festival Eurojazz, en la Ciudad de México.
La presentación comenzó con un intro de piano, al que luego se unieron el bajo y la batería para dar paso a la llegada de Beat Kaestli e iniciar una interpretación con reminiscencias del jazz clásico y el blues pero con nuevos arreglos para lograr un sonido nuevo.
El talento de los músicos quedo demostrado desde la primera canción Habanera de “Carmen” una ópera de Georges Bizet, la más famosa y celebre de dicho autor que vino a cambiar el paradigma de las óperas cómicas de la época.
Continuamos con Somebody New, canción de amor que, en palabras de Kaestli, trata sobre “despertar un día, verte al espejo y notar que estás diferente, más feliz, más dichoso”. Sentimientos que transmitieron en su música, siendo el bajo el instrumento que más destaco a la par de la voz de Beat Kaestli.
Expresando el placer que le da estar de nuevo en México, y por primera vez en Morelia, en un Festival tan hermoso y prestigiado, la presentación siguió con Conflicted composición Tino Derado y Beat Kaestli, para dar paso a Poor Lonely Butterfly, exhibición del talento del baterista Gabriel Puentes, logrando animar al público que además estaba encantado por la fuerza vocal de este talentoso cantante de jazz.
Durante el concierto el grupo presentó piezas de su disco más reciente, Invitation, pero también del anterior titulado Far From Home. Una de las piezas que más gustó al público fue Color of a Fool y Silence of my Heart, la última compuesta por el jazzista mismo y siendo otra canción tranquila, con una atmosfera amorosa y tranquila hipnotizando al auditorio, quienes quedaron encantados por la música que estaban escuchando. Se trató del momento más emotivo delo concierto por ser un tributo a Eugenio Toussaint, ya que además de ser un magnifico jazzista inspiración para Keastli, llegaron a trabajar juntos y a desarrollar una amistad por lo que el tema es quizá el más especial para esta agrupación.
Sunday Morn’ logró seguir con el ambiente mágico creado hasta ese momento, sorprendiendo a propios y extraños con el amalgamiento musical que logran estos músicos, conectados en todo momento, sin desentonar y con una complicidad inigualable entre ellos.
En el momento de mayor conexión entre músicos y público, llegó el momento de dar fin a la presentación con La vie en Rose original Edith Piaf, tan conocida y aclamada por la audiencia que sin duda se fue del recinto con un buen sabor de boca gracias a la calidad musical de Beat Kaestli.
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