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México, D. F.- Las personas severamente obesas mueren 8 a 10 años antes que las de peso normal, por lo que en México se podrían evitar 55 mil muertes derivadas del sobrepeso y la obesidad mejorando los hábitos alimenticios, y atendiendo elementos esenciales como la actividad física.
Los mexicanos viven a un ritmo acelerado, rodeados de comida “chatarra” y sin la integración de actividad física, lo que ha impactado en los niveles de obesidad y sobrepeso. En el estudio LA OBESIDAD Y LA ECONOMÍA DE LA PREVENCIÓN de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), ubica a México como el país con mayor índice de obesidad y sobrepeso pues dos de cada tres mexicanos registra estar por encima de su peso normal.
Por esta razón la obesidad se está convirtiendo en el enemigo público número uno en cuestión de salud, por lo que resulta fundamental un programa integral tanto de prevención como de control de peso que abarque tanto un diagnóstico médico, un programa nutricional, una rutina de ejercicios y una valoración psicológica personalizada.
Todo ello es ofrecido por el Centro de Atención Integral en Salud Metabólica, el cual es dirigido por el Médico Carlos Narváez Pichardo, egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El Centro de Atención Integral en Salud Metabólica ofrece a sus pacientes la identificación oportuna de patologías y daños a los órganos producidos por la obesidad; identificación y corrección de errores en la alimentación prescribiendo un Plan Nutricional Personalizado; determinación de capacidad aeróbica y plan de mejoría gradual en condición física; y fundamentalmente, la identificación de causas emocionales asociadas a conductas alimentarias desfavorables.
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