Ansiedad generalizada afecta calidad de vida

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Por Héctor Medina Varalta

El trastorno de ansiedad generalizada (TAG) es un trastorno de ansiedad crónico y debilitante, que afecta del 2 al 6 por ciento de la población entre los 20 y 40 años en México y se caracteriza por una preocupación persistente, excesiva e incontrolable de las cosas de la vida diaria. La ansiedad está directamente relacionada a preocupaciones excesivas, y puede manifestarse en actitudes como miedo a que un familiar cercano o la misma persona que sufre este trastorno puedan tener un accidente, enfermarse o morir. Los pacientes con TAG experimentan frecuentemente síntomas físicos como tensión muscular, fatiga, alteraciones del sueño, entre otros, lo que repercute directamente en la calidad de vida de quienes lo padecen.

La ansiedad, una respuesta emocional
El Dr. Amado Nieto, secretario de la Academia de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí y médico psiquiatra, comenta que la ansiedad es una emoción universal y es la percepción subjetiva ante una amenaza real o figurada, es una respuesta emocional y física ante un peligro o una amenaza que percibe el ser humano. Es una experiencia normal y universal, sin embargo, esta experiencia que es normal en ciertas circunstancias se puede convertir en un síntoma que se convierte en una respuesta que no favorece a la adaptación de la persona a su medio ambiente. Ahí estamos hablando de una ansiedad anormal o patológica.

Diferentes trastornos de ansiedad
De acuerdo al Dr. Nieto, se han descrito aproximadamente seis trastornos de ansiedad, dependiendo de la manera como se presentan y es probable que sean los trastornos más frecuentes y más comunes en la población. Los estudios que se han realizado en México y en otros países, se estima que aproximadamente el veinte por ciento de la población podría tener un trastorno de ansiedad a lo largo de su vida.

Ansiedad y depresión
Normalmente, la secuencia de lo que se ha visto actualmente es lo que inicia primero es el TAG; la Encuesta Nacional Epidemiológicas y Psiquiátrica que se llevó a cabo en México, la única que se ha llevado en su especie en su país demostró que el primer trastorno psiquiátrico que se presenta en los mexicanos es un TAG. La edad en la que se inicia es aproximadamente a los 7 años de edad. Es muy común que se confunda con la ansiedad, las personas piensan que son nerviosas, que les da miedo todo, temen evitar riesgos, piensan que es cobardía, inhibición, timidez, y muchas veces es un TAG que se inició muy temprano y que puede tener tratamiento. La depresión ocurre después que el individuo rinde menos en su trabajo, obtiene pocos logros, tiene baja autoestima, sufre de mayores fracasos, tiene mala calidad de vida.
Es muy común que aparezcan al mismo tiempo la ansiedad y la depresión, pero en la mayor parte de los casos primero aparece la ansiedad y luego la depresión. Cuando se atiende a una persona con depresión, el profesional de la salud mental está obligado a buscar si antes del diagnóstico no habrá aparecido algún trastorno de ansiedad.

La ansiedad no respeta edad ni sexo
Nieto afirma que la población más afectada es la urbana, obviamente esto tiene que ver con los estilos de vida: el estrés, las prisas, el traslado, el ruido, la contaminación tienen que ver en el desencadenamiento de esta enfermedad emocional. Afecta por igual a hombres y mujeres y aparece en todas las etapas de la vida; hay etapas un poco más vulnerables, sobre todo para la mujer en ciertos periodos de su vida como el postparto y la menopausia podría haber más riesgo para padecer ansiedad. En general, podríamos decir que es un trastorno que afecta a todo tipo de sectores, a todo tipo de personas, de ambos sexos y todas edades. De aquí que la OMS considere que la ansiedad y la depresión sea la primera causa de discapacidad en el mundo para el adulto. La primera razón por la que una persona podría disminuir su capacidad para trabajar, atender a los hijos y el hogar, sería a causa de la depresión y la ansiedad. De aquí la importancia de poder diagnosticarlas y ayudar a las personas, algunas de las cuales piensan que no hay ayuda para su problema pues así nacieron.

Trastorno de Ansiedad Social
El Dr. Nieto asegura que el trastorno de ansiedad más común es el Trastorno de Ansiedad Social (TAS) y aparece más tempranamente en la vida. El TAS se manifiesta con un temor; la ansiedad aparece cuando la persona está sometida a un escutrinio público: cuando tiene que hablar en público, con personas que no conocen, algo que parecería cuestión de timidez. Al TAS también se le conoce como pánico escénico, pues son incapaces de enfrentar una situación pública. Esto es sumamente discapacitante porque las personas pueden incluso evitar acudir a un restaurante por temor a hacer el ridículo. Entonces, son trastornos muy comunes que se disfrazan de comportamiento aparentemente normales. En algunos casos puede ser algo no patológico; lo que lo hace patológico es que la persona sufra algún tipo de discapacidad: le impida trabajar y no realice sus actividades cotidianas. Sin embargo, hay tratamiento para cada tipo de ansiedad y depresión.

Dos tipos de tratamientos
En la actualidad existen tratamientos de tipo farmacológico como de tipo psicológico y son muy efectivos para el control y el manejo de los trastornos de ansiedad. Es importante mencionar que se trata de trastornos crónicos, habitualmente duran toda la vida. Por lo mismo, requieren de un tratamiento vigoroso para que la persona pueda estar realmente bien. Hay dos tipos de tratamiento farmacológico que son muy efectivos para tratar la ansiedad: los inhibidores selectivos de serotonina que no causan adicción y suelen ser muy bien tolerados por los pacientes y el otro tratamiento son unas nuevas moléculas que son más seguros.

Síntomas
Es muy importante señalar que entre un sesenta y setenta por ciento de los casos hay síntomas psicológicos acompañados de síntomas físicos. De hecho, los médicos saben que normalmente de lo primero que se quejan los pacientes son de los síntomas físicos: dolor de espalda, gastritis, mareos, dolor de piernas, fatiga, problemas para dormir, dificultad para concentrarse. Estos síntomas físicos se pueden confundir con otras enfermedades y buscan médicos con otras especialidades. “Por esta razón-concluye el Dr. Nieto-, es muy importante la educación médica por parte de los especialistas para conocer los trastornos de ansiedad y evitar tratamientos innecesarios. Uno de los tratamientos para combatir la ansiedad también es muy útil en la fribromialgia (la presencia de dolores musculares). La pregabalina es un medicamento que se ha utilizado en otros tipos de problemas neurológicos y no causa adicción, es un medicamento muy limpio, muy puro. No es un medicamento psiquiátrico propiamente pero es muy útil en los trastornos de ansiedad, sobre todo cuando ésta es acompañada de molestias físicas”.


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