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México, D. F., a 20 de agosto de 2009.
La sala Carlos Chávez del Centro Cultural Universitario alojó a los líderes continentales que se conjugaron en la firma del Compromiso con la Libertad de Expresión, para disfrutar del concierto ofrecido por la cantante paraguaya Lizza Bogado.
La cantante, con más de 28 años de trayectoria artística, tiene 16 discos grabados y en “Herencia”, canta en español, inglés, francés, portugués, hebreo y la lengua originaria de su natal Paraguay, guaraní. Es considerada una de las más dignas intérpretes de la música de su país.
Más de medio centenar de personas se instalaron en la intimidad de la sala Carlos Chávez, mientras la lluvia arreciaba en las inmediaciones, para escuchar plácidamente los temas que se incluyen en su disco “Herencia”, producción que, como dijo José Zepeda Varas, Director del Servicio Latinoamericano de Radio Nederland de Holanda al introducir la presentación de la intérprete: “provienen de todo lo que la niña, mujer, esposa y madre en que se ha convertido Lizza, ha heredado a través de su amoroso padre y de la cultura universal que bien ha aprendido a comprender e interpretar”.
El tema que da nombre al disco, dijo la cantante, le costó 16 años escribirlo y lo realizó como un homenaje a su padre quien murió prematuramente a la edad de 65 años. “Es una canción de gratitud y un himno contra la injusticia, pues mi padre también fue un perseguido”.
Con una voz diáfana, de gran emotividad y matices, Lizza Bogado condujo a su auditorio por un viaje a través de un repertorio que va desde canciones de su autoría, sin dejar de lado temas como Ne me quite pas de Jacques Brel; tema con el que, según la paraguaya, “voy a ver si me graduó como intérprete, pues es un reto para cualquier cantante“.
Interpretó asimismo Jerusalén de Oro, José Antonio de Chabuca Granda, Anunciacao del folklore brasileño, entre la docena de temas con que deleitó a la concurrencia.
Cuando Lizza cantó Herencia, algunos de los asistentes acompañaron la interpretación y mostraron algunas lágrimas, pues el tema es emotivo y potente.
“Herencia”, estará a disposición del público a finales del mes de noviembre, su producción y arreglos fueron cristalizados por el joven director Samuel Nallar y se grabó en sus estudios de la ciudad de México.
Para completar su presentación, cantó a sus compatriotas quienes no cesaban de aplaudir, la polka paraguaya Recuerdos de Ypacaraí con letra de la poeta Zulema de Mirkin y música de Demetrio Ortiz.
Los asistentes, entre los que se encontraban los miembros de la Knight International Journalism Fellow, aplaudían entusiasmadamente y no le permitían retirarse y, Lizza como una muestra de agradecimiento y cariño por la música mexicana cantó Ella, del compositor José Alfredo Jiménez, para despedir su recital.
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