Las demencias, Segunda parte

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Por: Héctor Medina Varalta

El dato:
Se calcula que el 1% de las personas de 60 años padece Alzheimer, y cada 5 años se duplica la cifra. Es decir, a los 65 años es el 2%; a los 70, es el 4%; a los 75%, el 8%; a los 80, el 16% y a los 85, el 32%. Esto significa que a los 85 años de edad, uno de cada tres ancianos tiene esta demencia.
Dr. Juan Alfredo Lozano Zarate

Hay demencias que son ocasionadas por drogas, por medicamentos o por sustancias tóxicas; hay demencias que pueden presentarse dentro de padecimientos psiquiátricos. Por ejemplo, una persona deprimida puede tener todo un cuadro que se parece mucho a la demencia, y no tener Alzheimer y no estar intoxicado, la misma depresión puede dar un cuadro parecido al de la demencia. Puede haber demencia en enfermedades del organismo que ocasionan trastornos metabólicos. Por ejemplo, en las enfermedades del riñón, del hígado y de la tiroides pueden haber cuadros de demencia.

Demencias reversibles
Juan Alfredo Lozano Zarate, médico neurólogo comenta que el delirio es un síndrome que se parece mucho a la demencia, pero no es tal, es un síndrome autolimitado que dura un tiempo corto, que aparece bruscamente y está asociado con alteraciones como falta de oxigenación cerebral, problemas circulatorios cerebrales, alteraciones metabólicas que ocurren habitualmente cuando los pacientes se encuentran hospitalizados, sobre todo en las terapias intensivas, en la que el paciente dura varios días y el paciente puede desconectarse de los aparatos y puede presentar una parte del delirio que es muy agitada u otra en la que permanece casi dormido. Pero esos son cuadros que por lo general son reversibles, a diferencia de la enfermedad de Alzheimer que no es reversible. El delirio es un cuadro que aparece bruscamente en una persona que estaba bien, y que de súbito tiene problemas de orientación, atención, cálculo, incluso puede tener hasta agresividad.

Cuadro reversible de delirio
Los pacientes de la tercera edad que están en terapia intensiva frecuentemente tienen falta de oxigenación, eso da delirio; frecuentemente se les aplica medicamentos que dan delirio; tienen infecciones que dan delirio, alteraciones metabólicas con el sodio y los electrolitros que puede provocar delirio y el paciente tiende por regresar a su casa, piensa que está en ella, que la enfermera es su hermana, o está preguntando por familiares ya fallecidos. También puede tener alucinaciones, quitarse el suero, soluciones, etc.

Síntomas de demencia
Los focos de alerta son, los olvidos hacia circunstancias que uno conoce perfectamente: números telefónicos, domicilios, fechas, nombres de personas que son muy allegadas, tener dificultad para realizar tareas cotidianas: cocinar, perderse a una cuadra de distancia de donde vive, prender un cerillo, ignorar la fecha, día y hora en la que se vive, empieza a preguntar o a platicar lo mismo. Esas actitudes son un foco de alarma de que alguien está presentando alteraciones en la memoria. La demencia la manejan los neurólogos, los psiquiatras, los médicos internistas y los geriatras.

Enfermedad de Wilson
De acuerdo al Dr. Lozano, la enfermedad de Wilson es una anormalidad hereditaria en la excreción hepática (debido a una enzima) de cobre dando como resultado acumulaciones tóxicas del metal en el hígado, cerebro y otros órganos, sobre todo, en los ojos (en los anillos de Kaiser-Fletcher). Los efectos tóxicos en el hígado se manifiestan en hepatitis aguda y cirrosis. Cuando se encuentra el exceso de cobre en el cerebro ya está en todas partes. Sus rasgos comunes son parálisis momentánea, rigidez, babeos, dificultad para tragar y para pronunciar, así como alteraciones psiquiátricas. Los pacientes mueren por efectos de la toxicidad del cobre en el sistema nervioso central, con poca o ninguna evidencia del mal funcionamiento del hígado.

Otros tipos
Hay demencias que se deben a consecuencia de golpes en la cabeza. Por ejemplo, los boxeadores que después de golpes repetitivos en el cerebro finalmente pueden tener una demencia mejor conocida como “Demencia pugilística” o demencia postraumática, demencias por hematomas que se forman en el cerebro, demencias infecciosas, por ejemplo, el SIDA. “Siempre en un paciente con demencia-concluye Lozano- es importante hacer un examen de VIH con el objetivo de descartar esta posibilidad”.

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