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- La baja calidad del semen y los abortos espontáneos son algunas de las complicaciones más frecuentes por esta adicción.
Ciudad de México, mayo de 2011. En el día internacional de la lucha contra el tabaco que se celebra cada año el 31 de mayo, es importante hacer una reflexión sobre todo lo que esta adicción puede afectar a nuestro organismo: cáncer, enfisema pulmonar, problemas cardiovasculares y también dificultad para lograr un embarazo exitoso.
El tabaquismo es una de las condicionantes para padecer problemas de infertilidad, señalan los especialistas en biología de la reproducción del Instituto Ingenes. Esto se debe a que el cigarrillo contiene sustancias nocivas para el desarrollo adecuado de las células reproductoras en el hombre y está asociado con problemas de desequilibrio hormonal en las mujeres.
Según información de la Organización Mundial de la Salud, el tabaco en cualquier de sus formas, puede causar alteraciones del espermograma como la oligospermia –que es cuando hay una cantidad baja de células reproductoras-, la movilidad de los espermatozoides y su deformidad, que pueden ocasionar infertilidad en el hombre.
En la mujer, el consumo de tabaco le puede originar menopausia temprana, alteraciones hormonales y cáncer de cérvix, que se traduce en menos probabilidades de concebir.
¿Cómo afecta el tabaco la fertilidad?
Cuando una persona consume un cigarrillo, introduce a su cuerpo cientos de sustancias nocivas para el organismo como el alquitrán y la nicotina, los cuales junto con el dióxido de carbono propio de la combustión, originan una disminución en la oxigenación del cuerpo y la formación de radicales libres
Esta situación ocasiona que las células reproductivas masculinas bajen su calidad y cantidad. Estudios internacionales señalan que los hombres fumadores tienen hasta 70 por ciento de probabilidad de tener una pobre calidad del esperma. Además, es una causa de disfunción eréctil.
Por su parte, en las mujeres las sustancias nocivas que hay en el tabaco afectan directamente su salud hormonal, ocasionando desequilibrios que complican su ciclo ovulatorio y dificultan su capacidad para lograr un embarazo. El tabaco afecta la producción de estrógenos, origina pérdida de ovocitos y acelera el envejecimiento ovárico.
Sin embargo, si una mujer fumadora llega a embarazarse, los riesgos de perder al bebé por un aborto espontáneo se incrementan, así como las complicaciones para el desarrollo natural y sano del embrión, ya que puede originar embarazos ectópicos o fuera del útero.
Los tratamientos
Los especialistas del Instituto Ingenes señalan que actualmente existen diversos tratamientos de reproducción asistida de alta y baja complejidad que ayudan a las parejas con problemas de infertilidad a lograr un embarazo exitoso, incluso para aquellas parejas fumadoras.
Al inicio de cualquier tratamiento es importante que si el hombre o la mujer consumen tabaco deben dejarlo o disminuir la cantidad, si desean tener un bebé sano en casa, para reducir al máximo los riesgos de las sustancias en el organismo del nuevo ser y favorecer el éxito de los tratamientos.
En el hombre, cada 90 días hay una nueva producción de espermatozoides, por lo que al dejar de fumar sus células reproductoras pueden retomar su calidad perdida del semen y en las mujeres también puede ser reversible el daño.
Lo importante es acudir con los especialistas, ya que a través del estudio y la historia clínica de la pareja, podrán decidir cuál es el tratamiento idóneo para lograr un embarazo exitoso.
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