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La Feria Internacional del Libro en la ciudad de Guadalajara, en su 25 aniversario, se vistió de gala al recibir no sólo a autores extranjeros, sino nacionales. Tenemos el caso de Sanjuana Martínez, una escritora muy valiente al ventilar y profundizar en su libro “La Frontera del Narco” (Editorial Planeta), los efectos de la guerra contra esta lacra social declarada por Felipe Calderón. La autora es una mujer jovial, atractiva, sencilla y muy simpática.Sanjuana Martínez considera que la estratagema de Felipe Calderón contra el narco, es una guerra fallida, una guerra delirante, una guerra fracasada.
“Y no lo digo yo, lo dicen las estadísticas que dan muestra de ese fracaso terrible. Si cuando empezó el narco había catorce cárteles, ahora hay 40, si cuando empezó la guerra contra el narco había unos cuantos muertos ahora hay 50 mil; había 600 desaparecidos, ahora hay 30 mil; había unos cuantos huérfanos, ahora hay 20 mil; y no hablemos de los desplazados que están al Norte de la República. Creo que es una guerra que ha generado una estela de dolor y sufrimiento a los largo y ancho del país, pero particularmente en la frontera de esos 3 mil 200 kilómetros que nos separan entre México y Estados Unidos.”
220 femenicidios en Nuevo León
La célebre escritora y periodista considera que el fenómeno de los femenicidios se debe a que hay una guerra entre cárteles, formados particularmente por hombres, mercenarios, delincuentes, y en donde el cuerpo de la mujer es el botín de esta guerra contra el narco, pues cada día estamos viendo más odio, más inquina, más desprecio al origen; cada vez son peores los asesinatos y las mutilaciones genitales que les hacen con el componente de género, desprendimiento de pezones, descuartizadas, decapitadas, embarazadas con el vientre abierto. Estamos viviendo verdaderamente una barbarie contra las mujeres. En Nuevo León hay más de 220 femenicidios en lo que va del año. Se ha pedido la alerta de género, pero el gobernador Rodrigo Medina no la quiere hacer, igual que Peña Nieto en el Estado de México. Ya no es solamente las muertes de Ciudad Juárez, son las muertes de todo México.
Policías al servicio del crimen organizado (polizetas)
Martínez manifestó que cierto día, a las 6 de la mañana en la carretera Cadereyta-Allende, la policía encontró tres cajas de plástico. Estaban llenas de pedazos de cuerpos humanos. Inmediatamente supieron que se trataba de mujeres. Se llamaban Katia Cavazos Castilla y Kendy Cavazos Caballero. Tenían 24 años. La primera era sobrina de Juana Aurora Cavazos, secretaria de Desarrollo SocialEstatal. Los policías de Allende las entregaron al crimen organizado para que las mataran. La saña del asesinato fue exhibida incluso en el mensaje dejado por los criminales: “Esto les pasa por charoleras, ahí te van subteniente Martínez”. La versión de los policías es que habían sido arrestadas por ingerir bebidas alcohólicas en la Plaza de Cadereyta y después encarceladas en la prisión municipal. De allí fueron “levantadas” o más bien “entregadas” al crimen organizado. Cuando las dos chicas fueron encarceladas, el novio de la hermana de una de ellas, un militar conocido como el subteniente Martínez habló a la comandancia para que las dejaran libres, que en seguida pagaría la multa. Ésa fue la respuesta. Por el doble asesinato fueron investigados 14 policías de los 30 que existen en Allende. También encontraron la cabeza de una mujer en el restaurante “El Cabritero”, en pleno Gonzalitos, en el Centro Histórico de Monterrey, nunca encontraron el cuerpo, sin embargo, encontraron cinco pedazos del cuerpo de una mujer sin cabeza dentro de un costal.
Explicación del fenómeno
El anfiteatro se tiene que ver en la obligación de entregar a los familiares solamente partes del cuerpo humano: una cabeza o unos pedazos del cuerpo. Hay que imaginar el dolor de las madres de esas víctimas; sus asesinos son peor que animales. “Cada vez-resalta-los crímenes son cada día más alejado de lo que nosotros somos, seres humanos: cada vez son más crueles, más salvajes y más sanguinarios. ¿Cuál es el límite? Considero que el límite es no sólo combatir el narco policiacamente, sino intentar acabar o combatir la pobreza, acabar con la desigualdad social, con hacer más equilibrada la distribución de la riqueza; en ese momento empezará a disminuir la violencia, pues combatir también la pobreza es combatir la violencia”.
La convivencia de las policías municipales estatales en el tráfico de drogas en el narcomenudeo es absoluta, es decir, es plato o plomo, o cooperas o cuello. Los policías se venden porque ganan muy poco, no es una justificación, pero si una explicación de lo que está pasando con este fenómeno. Esta guerra fue delirante porque no se depuró a la policía antes, por eso es el gran fracasode Calderón Hinojosa.
La Carretera de la Muerte
De acuerdo a Sanjuana Martínez, en Monterrey, Nuevo León se vive un desgobierno, no hay autoridad, es un gobierno ausente. Rodrigo Medina se llevó a su familia hace más de dos años a vivir a McAllen, Texas, sucede lo mismo con otros gobernadores de la república que sacan a sus familias, y que ellos mismos vienen a despachar un par de días y el resto viven en la frontera, y el resto de los mexicanos a enfrentar al narco. Por eso, cuando Calderón dice “hay que combatir a los delincuentes”, lo dice desde la comodidad de Los Pinos, pero que se venga acá, a los chingadazos, ¿por qué no se viene a enfrentarlos al frente de batalla: donde secuestran migrantes, donde desaparecen autobuses enteros de pasajeros en la Carretera de la Muerte que es de Ciudad Victoria a Matamoros: el feudo del cártel del Golfo, esa impunidad endémica que cubre los asesinatos de migrantes?
La valiente periodista ha estado en la Posada Belén Migrante que está en Coahuila y ahí están los Zetas esperando como zopilotes a que salgan sus presas para detenerlas, secuestrarlas y pedir rescate a sus familias en Guatemala, Honduras, El Salvador, entre otros países latinos. El padre Pedro ha pedido medidas cautelarías que el gobierno de Coahuila (los Moreira) nunca acató. Es la indiferencia, la indolencia ante tanta barbarie.
Combate a la pobreza
“Las amenazas forman parte de nuestro trabajo cotidiano, lo único es que el miedo si se siente, y no me da vergüenza decirlo: tengo miedo porque éste me ayuda a medir el terreno, me impulsa a seguir adelante, no es un miedo paralizante, pues me ayuda a continuar adelante en el camino de la denuncia social del periodismo independiente y libre. Y ese miedo también es un catalizador; siento miedo, pues cuando alguien me persigue pienso ‘¿a quién le llamo? … ¿A la policía? … ¡si son los mismos! Lo que hemos hecho (al igual a quien escribe estas líneas, quien radica en Veracruz) es una red de protección entre los colegas: checar algunas placas de autos, si algún tipo me está siguiendo, llamo a un compañero para que la acompañe. Porque es la única solución: la solidaridad entre nosotros”
Sanjuana resaltó que hay que luchar por un México distinto y también considera queéste necesita una refundación de la República, una revolución de las conciencias, un nuevo gobierno, un gobierno distinto al que nos ha gobernado. “Ojalá-afirmó-y que la Social Democracia llegue al poder y empecemos a ver los beneficios y el combate a la pobreza, sólo así se terminarán los privilegios de los poderosos”.
Esclavas sexualesPor otra parte, Martínez señaló que, en los últimos años la penetración femenina en el tráfico de drogas ha sido decisiva para el crecimiento multinacional de los cárteles mexicanos. Las parejas de los narcos se dedican a dirigir el menudeo de la droga, a las relaciones públicas para el blanqueo de capitales, y por supuesto a la administración de la empresa familiar. Así mismo, en los pueblos los narcos secuestran a las mujeres que les gustan. A una persona que estaba cargando gasolina en una camioneta, le dijeron “me gusta tu hija, déjamela, al rato te la traigo”. Por supuesto, el padre de familia no aceptó, pero lo apuntaron con una pistola y se la llevaron. La periodista asegura que utilizan a las mujeres como esclavas sexuales, las prostituyen y las venden. “Se puede vender un cuerno de chivo una sola vez, a una mujer la pueden vender cientos de veces. Por eso se han metido al tráfico de mujeres, pues es el segundo negocio ilegal más lucrativo a nivel internacional después de las drogas.
Los muertos de los Arcos del Milenio
La atractiva autora manifestó que en los Arcos del Milenio de la ciudad de Guadalajara, se encontraron26 cuerpos, la mayoría de ellos inocentes, gente que fue levantada de la calle. Hay el caso de cuatro muchachos que estaban comiendo tacos, que aparecieron entre esos asesinatos, que ahora las autoridades digan que eran Zetas, no es verdad, es la manera de enlodar a las víctimas para justificar los crímenes, pero no es así; no son daños colaterales, tienen nombres y apellidos; no son los muertos, son nuestros muertos; no son los desaparecidos, son nuestros desaparecidos. Hasta que este país no haga suyo el dolor de los demás, va a cambiar. La solidaridad es la máxima expresión delamor, y tenemos todos que acompañar a las víctimas. No porque no nos ha tocado no los vamos a acompañar, ya que la indiferencia ofende a todos los mexicanos.
Fox y Calderón implicados
El Chapo es el capo del sexenio, es el capo privilegiado por los acuerdos que hizo con él nuestro gobierno, particularmente Fox y Calderón. Eso que se dice que por primera vez un presidente se atrevió a combatir al narco, así es, pero pactando con uno, eso no se debe de hacer, por eso estamos como estamos. Por otra parte, el sicariato está formado por los 7 millones de niños que ni trabajan ni estudian; es el caldo de cultivo para el crimen organizado, es el ejército de los Zetas. De ahí sacan a los sicarios como el “Ponchis”. Son niños sicarios y asesinos, especializados en decapitación y en descuartizar; es muy triste, pero es la realidad, son niños que están abandonados por las políticas públicas, no tienen acceso a la educación, no tienen acceso a la recreación, no tienen acceso al trabajo. Todo esto los hace delincuentes, y los penales son escuelas del delito; todos los penales están a manos del narco en este momento y nadie hace nada.
Voces que rompen los silencios
La diferencia de este libro es que habla de las dos violencias: la violencia del narco y la violencia del estado, es decir, la violencia del ejército, la marina, los policías que también desaparecen a las personas, las torturan y ejecutan. En México existen centros clandestinos de detención, nada más que nadie habla de ellos, están manejados por el ejército y la marina. En el norte de la república ya hay varios identificados en donde la marina se lleva a los secuestrados y después los desaparecen, hay 30 mil personas desaparecidas, no todos en manos del crimen organizado, sino también del ejército, la marina y lospolicías.
A una mujer otomí le mataron a su esposo, a su hermano y a su padre, para colmo el DIF la compensó con una despensa. Es una burla y una infamia, son unos sinvergüenzas porque hasta ahí se ve la desigualdad; las víctimas pobres ni siquiera tienen derecho a exigir nada: no hay una compensación real, no hay ayuda del estado, están abandonadas, les dan una despensa compuesta de galletas de animalitos, arroz, frijol y una mazeca, y ya con eso los quieren contentar, es una situación muy denigrante. Aparte, esos señores regresaban de trabajar, pues eran albañiles, y todo indica que los mataron los policías judiciales.
“Lo importante-concluye-de este libro es que es una obra coral, que está llena de voces que rompen los silencios ominosos de este país. Estamos ahora en la investigación de la misma línea de todo lo que tiene que ver con la violación de los derechos humanos, del ejército y de la marina, pero también de lo que no se ha combatido, que es el sistema financiero del narco, de cómo lavan millones de pesos, seudoempresarios y comerciantes de manera cotidiana en la impunidad. Ese es el error de Calderón: no haber combatido al narco financieramente, y ahí hay mucho que investigar, especialmente a través de los casinos; hay mucha tela de donde cortar y se va a develar para el próximo libro”.
Por: Héctor Medina Varalta
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