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El ciclo Tesoros
del Cine Mexicano se exhibirá del 2 al 7 de septiembre en la Sala 9, Juan
Bustillo Oro
- Se trata de una
selección de seis piezas fundamentales de la cinematografía mexicana de los
años treinta
- Santa, Redes, Dos
monjes, ¡Vámonos con Pancho Villa!, Águila o sol y Los de
abajo, integran el programa
La historia cinematográfica de
México no puede concebirse sin revisar las piezas que marcaron la pauta entre
el incipiente cine nacional de principios del siglo pasado y la Época de Oro
del Cine Mexicano. Son filmes considerados joyas de nuestro cine que
representan la transición entre una producción cinematográfica de bajo
presupuesto y el nacimiento de una industria fílmica a la altura de las más
grandes del mundo.
Con el ánimo de valorar estas
películas, la Cineteca Nacional presenta el ciclo Tesoros del Cine Mexicano del
2 al 7 de septiembre, en la Sala 9, Juan Bustillo Oro. El programa integra seis
largometrajes que marcaron tendencia gracias a sus argumentos, técnicas de
filmación y narrativas novedosas alineadas con las vanguardias.
El ciclo da inicio
con Santa (Antonio Moreno, 1931), basada en la novela homónima de
Federico Gamboa. Se trata de la primera cinta sonora mexicana y la segunda
adaptación del célebre libro. La historia cuenta cómo una joven campirana
entrega su amor a un mal hombre y termina sumergida en los infiernos de la
prostitución urbana. El trabajo de sonido de los Hermanos Rodríguez potenció
este melodrama que sentó las bases de la industria e incluyó a personalidades
latinas reconocidas en Hollywood, participantes tanto en el cine hispano como
en la futura y vasta producción nacional.
En 1934, Fred Zinnemann y Emilio
Gómez Muriel dirigieron Redes, el primer ejemplo en México de un cine de
denuncia social. Lo que originalmente fue un ensayo fotográfico de Paul Strand,
se convirtió en un reclamo audiovisual sobre la realidad social de los
pescadores de México, interpretados por la población auténtica de Veracruz. El
proyecto, musicalizado por Silvestre Revueltas, narra la vida de un pescador
del puerto de Alvarado que organiza una revuelta contra un explotador de su
gremio. Redes fue recientemente restaurada en la Cinemateca de Boloña
gracias a materiales resguardados por la Filmoteca de la UNAM.
Asimismo, el conocedor de las
vanguardias cinematográficas europeas de los años 20, Juan Bustillo Oro,
también vivió su periodo de experimentación visual y sonora sin precedentes
durante los 30. Así realizó su opera prima Dos monjes (1934), filme
de inspiración visual expresionista y con una narrativa más cercana al
surrealismo francés. Apoyado en un argumento de José Manuel Cordero, presenta
un trágico triángulo amoroso que involucra a dos hermanos enamorados de la
misma mujer, que encuentran consuelo en un monasterio. El innovador filme de
Juan Bustillo Oro reflexiona sobre la locura, la imposibilidad amorosa y los
muchos rostros de una misma verdad.
Por otro lado, el ruso Arcady
Boytler encontró en el actor de comedia Mario Moreno y su personaje
“Cantinflas” un vehículo idóneo para retratar el entorno de las clases
populares urbanas, centrándose en su entretenimiento, como lo demuestra
en Águila o sol (1937). Sin pretensiones artísticas, Boytler refleja
la vida de las “carpas”, espacios en los que las clases populares hallaban su
diversión. Así observamos las aventuras de tres huérfanos: Carmelo, Adriana y
Polito que sobreviven en las calles hasta ya adultos, cuando conforman un
exitoso trío cómico-musical.
¡Vámonos con Pancho
Villa! (1935) y Los de abajo (1940) significaron el parteaguas
de las temáticas revolucionarias con un gran eco en la cinematografía mexicana.
Sin embargo, ambas se alejaron del tono patriótico y folclorista que inundaría
el cine mexicano industrializado en años posteriores.
Filmada con maestría por Fernando de
Fuentes, ¡Vámonos con Pancho Villa! es un prodigio visual y narrativo
que orquesta una desoladora visión sobre la lucha armada y el derrumbe de los
ideales que supuestamente la apuntalaban. Basada en la novela homónima de
Rafael F. Muñoz, muestra a cinco rancheros admiradores de Pancho Villa que se
unen a la División del Norte. Uno a uno mueren en combate y en absurdas
situaciones que dejarán en Tiburcio Maya, el único sobreviviente, una amarga
visión de la lucha revolucionaria.
Mientras que Los de
abajo es una película más cercana a los esquemas del cine industrial,
privilegiando el melodrama y la acción por encima de la visión crítica de la
novela homónima de Mariano Azuela que la inspiró. Escrita por Aurelio Manrique,
la trama presenta a un campesino y sus compañeros quienes se unen a la
Revolución alentados por ideales de justicia social. Sin embargo, conforme
avanzan en la lucha armada, su humanidad se va perdiendo ante la crueldad del
combate.
El ciclo Tesoros del Cine Mexicano
constituye pues una revisión por parte del amplio legado cinematográfico de
nuestro país, y que Cineteca Nacional presenta ahora también con el propósito
de que sea apreciado por las jóvenes generaciones.
Tesoros
del Cine Mexicano
Programación sujeta a cambios de
último momento
Sala 9, Juan Bustillo Oro
Martes
2
Santa
18:30
Miércoles
3
Redes
18:30
Jueves
4
Dos monjes
18:30
Viernes
5
¡Vámonos con Pancho Villa!
18:30
Sábado
6
Águila o Sol
18:30
Domingo
7
Los de abajo
18:30
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