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Se estima
que para el 2050, 30% de la población en México será adulto mayor.
- En la
actualidad, observamos un mayor número de adultos menores de 40 años con
enfermedades crónicas.
México, D.F., a 3 de julio de
2012.- La hipertensión arterial, colesterol elevado, diabetes mellitus,
sobrepeso, obesidad, sedentarismo, tabaquismo,
mala alimentación, son algunos de los principales factores de riesgo
para padecer enfermedades cardiovasculares, entre ellos, un infarto del
miocardio.
Por
desgracia en los últimos años las enfermedades cardiovasculares han tenido
un importante repunte en México, esto se debe al aumento de las enfermedades
crónicas como hipertensión arterial y diabetes mellitus, al creciente número de
adultos mayores y al estilo de vida que llevamos hoy en día, señaló la Dra. Luz
María Sánchez Romero,
Investigadora en el área
de Políticas y Programas de
Nutrición en el Instituto Nacional
de Salud Pública.
Asimismo,
dijo que de acuerdo a estadísticas sobre mortalidad, las enfermedades del
corazón en el año 2010 se reportaron alrededor de 105,000 fallecimientos siendo
la primera causa de mortalidad en mayores de 65 años y la tercera causa en el
grupo de 45 a 64 años.
Y
añadió que se estima que para el año 2050 el 30% de la población en México será
adulto mayor, Los cuales presentan una mayor probabilidad de padecer
enfermedades coronarias, convirtiéndose así en un grave problema de salud, que
de no tratarse de manera oportuna el número de pacientes seguirá en aumento.
Actualmente,
es alarmante el aumento de estas enfermedades
en pacientes jóvenes menores de 40 años, lo que conlleva a que sufran a
edad más temprana de enfermedad coronaria, infartos del miocardio, angina de pecho,
entre otros padecimientos cardiovasculares.
Por ello,
es
importante que los médicos de primer contacto detecten estos factores de riesgo
de manera oportuna, como una buena forma de prevenir los infartos y la recurrencia
de los mismos. También es importante que el médico eduque a los pacientes que
ya tuvieron un primer infarto, y de esta manera pueda prevenir un segundo
infarto con medidas no farmacológicas que fundamentalmente van dirigidas hacia
ejercicio físico, control de peso corporal, modificación de los hábitos
dietéticos y medidas farmacológicas a base de medicamentos eficaces y seguros que
ayudarán no solamente a la recuperación, sino también a prevenir nuevos casos
de infarto, agregó la Dra. Luz María
Sánchez Romero.
Por
fortuna hoy en día existen tratamientos que nos ayudan a prevenir los infartos
o la repetición de éstos, reduciendo así los índices de mortalidad, la
morbilidad , sobre todo, a disminuir las complicaciones y secuelas de éstos y
por ende, los costos en cuanto a discapacidad y gastos por parte los sistemas
de salud para tratamiento de los eventos cardiovasculares como el Síndrome
Coronario Agudo o de las complicaciones en estos pacientes, dijo la
investigadora del Instituto Nacional de Salud Pública.
Se
recomienda que los pacientes adopten estilos de vida sanos, y acudan
periódicamente al médico para que de esta forma se puedan detectar de manera
oportuna riesgos que conlleven a padecer alguna enfermedad cardiovascular y
tratarlo de la mejor manera posible, finalizó la especialista.
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