Entradas
- El Sector Empresarial demanda apoyo del gobierno para reducir sus emisiones de carbono.
- La falta de inversión en tecnología verde perjudicará a largo plazo a las empresas.
México D.F. a 6 de Diciembre del 2010.- El tema del calentamiento global y la reducción de emisiones de carbono dominan en las agendas de los gobiernos y empresas, especialmente en torno a las negociaciones mundiales, tales como la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se lleva a cabo en la ciudad de Cancún. La evidencia científica muestra que el costo de la inacción será mucho mayor que el costo de invertir en tecnología que sea amigable con el medio ambiente.
La COP 16 inició el pasado 29 de Noviembre entre demandas por superar diferencias y adoptar nuevos y más firmes compromisos para controlar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Los 193 países participantes esperan lograr acuerdos que permitan canalizar miles de millones de dólares y tecnología ecológica a los países en desarrollo, para que éstos puedan abandonar las fuentes de energía basadas en combustibles fósiles.
Al igual que los gobiernos de los países participantes en la COP 16, el sector empresarial a nivel global está tomando acciones para reducir sus emisiones de carbono y así conseguir una mejora en el medio ambiente. Por tal motivo, Regus – el proveedor global en soluciones para lugares de trabajo, a través de su encuesta global Regus Business Tracker, ha indagado con más de 15,000 líderes de negocios provenientes de la Unión Europea, Asia, África y América, sobre las gestiones que están tomando sus empresas en torno al Cambio Climático.
La encuesta Regus Business Tracker reveló que tan sólo el 37% de las compañías a nivel mundial, mide sus emisiones de carbono y menos de un quinto de las compañías (19%) miden las huellas que despide éste en sus actividades. Asimismo 46% de las compañías a nivel global declararon que sólo invertirán en equipos operativos de bajas emisiones de carbono si los costos de funcionamiento fueran los mismos o menores que los de los equipos convencionales. En este punto es importante recalcar que sólo un decepcionante 40% ha invertido en equipamientos de bajas emisiones de carbono y tan sólo el 38% tienen una política de la empresa para hacerlo.
En México específicamente, la encuesta encontró que tan sólo 10% de las compañías monitorean sus huellas de carbono y 34% su consumo de energía. Menos de un tercio (31%) tienen una política de empresa para invertir en equipamiento de bajo consumo de energía. Los costos operativos resultaron ser importantes para un 34% de las compañías que declararon que sólo invertirían en equipamiento de bajas emisiones de carbono si éste fuera más barato o igual para manejar cómo un equipamiento convencional. Finalmente un total de 75% de las compañías declararon que si el gobierno ofreciera estímulos fiscales para adquirir estos equipos de bajo consumo de energía o de bajas emisiones de carbono, acelerarían significativamente las inversiones verdes.
Mónica Cerda, Directora de Regus México, comenta: “Las conversaciones en la COP 16 son un intento por parte de los gobiernos por superar la brecha entre países ricos y pobres frente al calentamiento global, cuando hay pruebas cada vez más contundentes de que el clima del planeta está cambiando de manera que nos afectará a todos. Si realmente se desea alcanzar el objetivo de reducir las emisiones de carbono, entonces se necesita un apoyo fundamental de los gobiernos hacia las empresas, realizando énfasis en las pequeñas y medianas organizaciones. Ya que actualmente la tecnología verde de bajas emisiones muchas veces se limita en el rango y es vendido con un precio de lujo, lo cual hace imposible para una PyME iniciar acciones para reducir sus emisiones de carbono.
Las deducciones fiscales ayudarían enormemente, según lo muestra la encuesta de Regus y el acelerar la adopción de tecnología verde también ayudará a crear un mercado en masa en donde los precios por unidad bajen. Las inversiones ambientales no están limitadas únicamente a la tecnología, pero necesitan ser aplicables en todas las iniciativas efectivas y medibles, tales como la minimización de las premisas de subocupación. En la actualidad, se estima que un 38% del espacio de oficina no es ocupado en ningún momento[1], sin embargo ese espacio aún sigue siendo calentado, enfriado e iluminado, generando toneladas de emisiones de carbono innecesarias cada año. El reducir la subocupación de oficinas debe por lo tanto ser tan elegible como incentivos fiscales para equipamiento de bajo consumo de energía.
Regus invita a las empresas a crear conciencia, y a llevar a cabo prácticas de trabajo flexibles que permitan adoptar esquemas renovados, tales como el home office, virtualización e implementación y actualización de tecnología; las cuales en primera instancia permitirán la reducción de emisiones de carbono importantes emanadas por los automóviles al transportarse diariamente al trabajo y quedarse hasta dos horas parados o a vuelta de rueda por el tráfico habitual.
Acercarse a la oficina del futuro es sencillo sólo es cuestión que las empresas pongan su granito de arena, adopten conciencia verde y flexibilicen sus esquemas de trabajos obsoletos. Hay que recordar que la primera regla es entender que el trabajo no es un lugar a donde ir, sino donde tú estás.
Metodología
Más de 10,000 líderes de negocios provenientes de la base de datos de Grupo Regus contactos fueron entrevistados durante agosto y septiembre de 2010. La base de datos global de Grupo Regus consiste en más de 1 millón de negocios de todo el mundo, la cual es representativa de altos directivos y propietarios de negocios. A los encuestados se les preguntó sobre sus acciones en el control de energía y supervisión de emisión de carbono, junto con sus puntos de vista sobre el futuro de una serie de temas relacionados al lugar del trabajo. El estudio fue dirigido y administrado por la organización independiente, MarketingUK.
regresar/home
0 comentarios:
Publicar un comentario