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FORT WORTH, Texas - Tony Stewart hizo valer sus palabras con una victoria convincente en la AAA Texas 500 del domingo en el Texas Motor Speedway, la octava carrera en la Caza por la Copa Sprint de NASCAR.
Con su cuarta victoria en la Caza y la 43ª de su carrera, Stewart disminuyó la ventaja del segundo lugar, Carl Edwards, en la serie, pues anotó la cantidad máxima de puntos (48) para recortar la ventaja de Edwards de ocho a tres puntos con dos carreras para que termine la temporada.
Tras ganar la semana pasada en Martinsville, Stewart prometió que Edwards no dormiría en tres semanas durante el tramo final de la pelea por el título. El domingo por la tarde, Stewart dejó que su auto hablara al arrebatarle la punta a Edwards en un reinicio en la vuelta 275 y regresar al frente luego de un ciclo de paradas en pits bajo bandera verde a finales de la carrera.
"No creo que tengamos algo que decir", dijo Stewart en el carril de la victoria. "Creo que nuestra actuación de hoy habló por sí misma. Sabe que estamos ahí - créanme. ... Hoy Carl nos mantuvo con los ojos abiertos. Obtuvimos todos los puntos extra que pudimos y nos adjudicamos el triunfo, así que ganamos más de lo que necesitábamos en el porcentaje de la semana".
"Ya no falta mucho. Es un lugar, si alguien gana la carrera. Vamos a hacer exactamente lo que necesitamos hacer. En este momento me siento muy confiado".
Stewart no recuperó el liderato sino hasta la vuelta 330 de 334, cuando Jeff Burton perdió su apuesta del consumo de combustible y se le acabó a tan sólo cuatro vueltas del final.
Edwards, cuya única victoria este año fue en Las Vegas en marzo, se consoló al retener el liderato en los puntos y en alejarse del tercer lugar, Kevin Harvick (a 33 puntos) y del cuarto lugar, Matt Kenseth (a 38 puntos).
"Aunque nos hubiera encantado ganar hoy, estar tres puntos adelante, y luego alejarme del tercero y cuarto lugar, parece que realmente va a ser un duelo entre Tony y yo, y eso va a ser muy divertido", comentó Edwards.
Kasey Kahne llegó tercero, seguido de Kenseth y de Greg Biffle. Los coequiperos en el Hendrick Motorsports, Jeff Gordon y Dale Earnhardt Jr., finalizaron sexto y séptimo, respectivamente.
Stewart tenía 142 vueltas lideradas al momento en que el Toyota de Joey Logano empezó a tirar aceite en la recta trasera en la vuelta 261, lo que causó la cuarta bandera amarilla de la carrera. Edwards, Stewart, y los cinco autos de atrás cambiaron sólo los neumáticos del lado derecho en la vuelta 263.
Edwards arrancó muy bien en el reinicio de la vuelta 267 y se escapó para tener una ventaja de más de un segundo antes que NASCAR ondeara la quinta bandera amarilla en la vuelta 270 debido a restos en la curva 3. Los 13 primeros autos se quedaron en la pista bajo la bandera amarilla, y Stewart se quedó con Edwards en el reinicio en la vuelta 275, hasta que rebasó al No. 99 Ford por fuera.
"Creo que si hubiera podido quedarme adelante de él, hubiera podido agarrarlo", aseveró Edwards. "El reinicio anterior a ese patinó sus neumáticos, y me sentí realmente bien ahí, (pero) sincronizó muy bien el último reinicio y estuvo en mi portezuela".
"Le doy crédito a ellos. Hicieron un buen trabajo, pero ahora tenemos que marcar el alto aquí. Aguantamos, lideramos los puntos, tenemos que marcar el alto en estas dos últimas carreras y no puede haber un mejor final que en Homestead. Creo que la gente debe seguir esto. Se va a poner muy emocionante y me alegro de que Tony y yo estemos ahí para poder competir por el campeonato".
Notas: Al sustituir a Kyle Busch, quien fue castigado por NASCAR por chocar a Ron Hornaday Jr. bajo bandera amarilla en la carrera de las camionetas del viernes en Texas, Michael McDowell finalizó 33º, tres vueltas atrás. ... Denny Hamlin, Kyle Busch y Ryan Newman fueron eliminados de la contienda por el título.
Por: Reid Spencer
Sporting News NASCAR Wire Service
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