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El país que hemos construido en doscientos años, esencialmente ha fracasado: no somos una nación ni justa ni próspera ni segura. ¿Podrá el ejercicio de autocrítica y confrontación con lo que hemos sido (y somos) transformarse en la primera piedra de la reconstrucción. La respuesta tiene mil y un rostros posibles. Uno de ellos te pertenece a ti.
Este texto es una revisión de lo que ha sido México en los últimos 40 años: son dos ensayos, uno describe el coautor y amigo de Alejandro Rosas, Ricardo Cayuela Gally; en tanto Rosas aborda desde una perspectiva histórica porque ahí es donde nosotros consideramos después de hacer un análisis que es donde viene los problemas de México; los problemas de México no vienen desde hace dos o tres siglos, sino de los últimos 40 años por el sistema corrupto que se fue gestando desde el siglo XX: impune, corrupto, autoritario, que finalmente permeó en la consciencia de la sociedad. Alejandro Rosas sugiere que para combatir la corrupción, para empezar, como sociedad, debemos ser más responsables. Es decir, seguir construyendo ciudadanía porque podemos achacarle mucha culpa al gobierno, a la clase política, que son un fracaso total, aun fracasando en la transición desde luego. Pero también nosotros como sociedad, muchas veces nos comportamos absolutamente de una manera total y absolutamente bipolar: por un lado podemos defender una gran causa: apoyar en el TELETÓN, una cruzada de cobijas para indigentes en invierno, unirse contra la marcha de la inseguridad. Pero, por otro lado, esa misma gente que puede hacer eso y que es muy noble, igual, tira la basura en la calle, no paga mantenimiento, da “mordidas”, se queda en doble fila, es muy fácil que se corrompa para hacer un trámite rápido.
El cambio tiene que venir de la sociedad“Todo ese tipo de cosas-apunta Rosas-son las que hay que erradicar como sociedad, y creo yo, que una vez que nosotros hagamos de la vida democrática parte de la vida cotidiana, entonces, ya la situación va a cambiar totalmente, y allí es donde se puede lograr la transformación del país, porque la clase política habrá que esperar al relevo generacional. Por lo pronto, no parece que el cambio venga de la clase política, sino tiene que venir de la sociedad. Hay que dejar la política de la “gandalla”: a ver cómo me chingo al de al lado. Sí, hay que ser demócratas; sí, hay que ejercer los derechos; sí, hay que ser libres y ejercerlos (los derechos) con libertad y con responsabilidad, pero hay que comprometerse desde la cosas más simples de la vida diaria hasta de las grandes causas que también nos gusta abanderar”.
Alejandro Rosas cree que las elecciones del 2012 van a ser un poco ríspidas, no tanto como el 2006, porque realmente el PRI lleva una ventaja que sería estúpido perderlas. También considera que la gente debe movilizarse mucho paraejercer el voto, aunque no les agrade mucho ninguno de los partidos. Entonces, hay que ir a ejercerlo. “Creo que va a ser un año menos difíciles que en términos políticos, en términos de las elecciones, aparenta. Considero todavía que el asunto más fundamental es la trama de la inseguridad y el crimen organizado.
López Obrador
De acuerdo a Alejandro Rosas es un personaje que será representativo dentro de la historia, pero es trasnochado, es decir, no considera que la izquierda que él propone, que es populista, es bastante intolerante, aunque hoy esté más moderado y puede jalar el voto del centro, el voto que él tuvo en el 2006, que lo dejó ir por la soberbia.“Finalmente, es parte de ese espectro político que hoy tenemos, no me parece que sea una alternativa de izquierda, sin embargo, si necesitamos un gobierno de izquierda claramente en México por tanta desigualdad que hay y por tantos términos de desigualdad, pero López Obrador no representa una izquierda moderna, sino la vieja izquierda dávica, dogmática e intolerante y creo que así no se puede construir, necesitamos estar más cargados al centro.
Josefina Vázquez Mota
Rosas considera que sería muy bueno que una mujer ganara la presidencia en México, sin embargo, el peor problema de Josefina es que está abanderada por el PAN, ya que este partido ha demostrado en anteriores administraciones que ha sido incapaz o no ha tenido el valor suficiente como para entrarle a los grandes problemas y empezar a desmontar, no porque lo pudiera solucionar en 12 años, pero ni siquiera de ha visto una voluntad de si vamos a construir. “Ahora, yo si creo después de lo que hemos visto con los presidentes, con los gobernantes, si le daría a la vida política nacional una bocanada de oxígeno o de aire puro, el que llegara una mujer a gobernar el país. Ahora, habría también que preguntarnos si estamos listos para esto, yo creo que sí, pero híjole, de repente el machismo mexicano de repente es tan palpable que quizá a mucha gente no le gustaría, incluso, las propias mujeres no las verían como nosotros, pero yo si creo que podría ser una alternativa como para replantear un poco el país, y ver si hay otro tipo de alternativas que sean a través de la visión que siempre es muy correcta de las mujeres en general.”
Acerca del libro
El México que nos duele es un libro valiente, escrito por dos testigos agudos de nuestro pasado y presente. En una intrépida valoración generacional, Alejandro Rosas y Ricardo Cayuela Gally nos enfrentan a episodios que hieren pero ayudan a la imprescindible tarea de conocer la realidad de nuestro país. Desde la fundación de la república hasta la crisis electoral del 2006, de la tradición autoritaria hasta las convulsiones de la democracia, de nuestros presupuestos pactos colectivos hasta el descubrimiento de que, quizás ni siquiera sabemos a dónde vamos, esta obra provocará irremediablemente enojo y frustración frente al recuerdo de oportunidades perdidas, vicios hechos cultura,, corrupción enquistada… Pero también la certidumbre de estar ante un diagnóstico honesto: una radiografía histórica y contemporánea que pretende responder a la pregunta: “¿En qué momento se jodió México?”. El México que nos duele es un libro que enfrenta las verdades incómodas y sienta las bases para conocernos mejor.
Alejandro Rosas
Alejandro Rosas (Ciudad de México, 1969) es historiador, catedrático de la UNAM y escritor que se ha dedicado a la divulgación histórica desde hace 20 años. Fue coordinador de investigación histórica de Editorial Clío y del área de divulgación de la Coordinación Nacional para las conmemoraciones del 2010. Es colaborador de Relatos e Historias en México, Letras Libres, Radio Fórmula y W Radio. Es autor del guión del documental 1910. La Revolución Espírita (2006) y entre sus obras publicadas destacan Los presidentes de México (Planeta 2001), Mitos de la historia mexicana (Planeta 2006); Cartas desde el Atlántico y Sangre y fuego (Planeta 2009).
Ricardo Cayuela Gally
Ricardo Cayuela Gally (Ciudad de México, 1969) estudió Letras Hispánicas en la UNAM y es editor crítico y ensayista. Fue jefe de redacción de La Jornada Semanal bajo la dirección de Juan Villorio. Es autor de la antología de Octavio Paz. Las palabras y los días (2008), del libro sobre Mario Vargas Llosa de la colección Para entender (2008) y del libro de entrevistas La voz de los otros (2009). Entre 2001 y 2006 fue director editorial de la edición española de Letra Libres y actualmente es jefe de redacción y editor responsable de Letras Libres México.
Por: Héctor Medina Varalta
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