Las mujeres maduras al reducir sus niveles de estrógenos aumentan su
riesgo cardiovascular
El tratamiento en dislipidemia es permanente.
Una de las etapas más interesantes en la vida de la mujer, es la
madurez. Hoy día la década de los 30 dejó de ser la etapa de oro, ahora es la
cuarta década de la vida donde la mujer explota al máximo toda su persona, pero
también, es el tiempo donde los cambios fisiológicos se inician. Es así como
18.8 millones de mujeres entre los 30 y 64 años, enfrentan una serie de cambios
en su organismo, uno muy importante es sin duda el climaterio. Por fortuna, el
ritmo de vida actual obliga a la mujer a tomar mayor conciencia de su salud, su cuerpo y su entorno. Por ello
necesita conocer las diversas etapas por las que atraviesa tanto en su
desarrollo físico como en el emocional. El
rol que viven hoy no es el mismo que el de hace dos o tres generaciones, las
enfermedades que antes ni siquiera eran preocupantes para el sexo femenino hoy
toman nuevas dimensiones. Estadísticas del Instituto Nacional de Cardiología
Ignacio Chávez, indican que en nuestro país, el infarto es la primera causa de
muerte entre las mujeres mayores de 50 años de edad. De ahí la necesidad de
informarse sobre las medidas preventivas para evitar este tipo de padecimientos.
El sistema cardiovascular de las mujeres es más susceptible al verse
afectado por estrés, aspectos hormonales, al exceso de grasas saturadas y, a
determinadas toxinas como el tabaco. Mujeres que fuman y tienen una menopausia
prematura aumentan entre dos y tres veces el riesgo de presentar una enfermedad
cardiovascular, de acuerdo con estudios que se han efectuado a nivel internacional.
En el climaterio, los niveles de colesterol tienen que estar mayormente
controlados, ya que es en este periodo cuando la producción de estrógenos,
que ejercen un papel protector en la
salud vascular de la mujer, disminuye. A diferencia de los hombres que tienen mayor riesgo de enfermedad
cardiovascular en su vida reproductiva.
El colesterol en la vida femenina
En la etapa de juventud y reproductiva, los estrógenos ejercen un papel
protector en la salud vascular de la mujer. A diferencia de los hombres
que tienen mayor riesgo de enfermedad
cardiovascular en su vida reproductiva. Cerca de los 40 años, las mujeres
comienzan a presentar alteraciones menstruales debido a que van perdiendo su
capacidad de sintetizar y producir estrógenos. Al llegar la menopausia se
produce un descenso en los niveles de estrógenos en el cuerpo y así la mujer
queda expuesta a un riesgo mayor de enfermedades cardiovasculares, debido a que
el ascenso del colesterol total, eleva el LDL (colesterol "malo") y
baja el HDL (colesterol "bueno").
El colesterol es una sustancia vital para el funcionamiento del
organismo. Sin embargo, su incremento en la sangre origina que se deposite en
las arterias, y pueda llegar a obstruir
el paso sanguíneo provocando ataques al corazón o cerebrales. Por fortuna, se
cuenta con tratamientos que apoyan al control del colesterol elevado. Y debido
al aumento de la incidencia en mujeres, y sobretodo, a que resisten menos el impacto de un infarto
-tienen 73% más posibilidades de morir tras un primer infarto que los hombres-
se realizan campañas como Salvemos el Corazón de las mujeres, a fin de
concientizar sobre la importancia de acudir
con el médico a un chequeo cardiovascular antes de los 35 años y, a partir de ese momento, realizarlo cada 5
años. Ya que en el climaterio, los niveles de colesterol debe estar muy bien
controlados.
Previniendo el colesterol
El colesterol es oportunista, si su incremento se conjuga con factores
como tabaquismo, hipertensión, diabetes u obesidad, puede dar grandes sorpresas
en el corazón, por lo que cuando se cuenta con alguno de estos factores, lo
mejor es someterse a chequeos de una vez por año. El Dr. Enrique Gómez Alvarez,
jefe del Departamento de Cardiología del
Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del ISSSTE, recomienda algunos aspectos
que la mujer debe cuidar para evitar que el colesterol obstruya sus arterias
como: Peso: la obesidad es un problema que favorece el colesterol malo.
Actividad física: Se recomienda hacer ejercicio regular mínimo de 3-4 veces a la
semana durante 30 minutos. Estudios muestran que el ejercicio eleva el nivel de colesterol Bueno. Alimentación: Una
alimentación sana, variada; coma fruta y verduras; cereales integrales, reduzca las grasas
saturadas y el colesterol, es decir disminuya la ingesta de grasa animal y de
prioridad a la carne blanca como pescado y pollo. Evite la comida precocida, la
mayoría contiene grasas trans o sometidas a hidrogenación (como el pan de
caja). Por su parte, los frutos secos ayudan a elevar el colesterol bueno.
Finalmente, si tiene el colesterol elevado siga las indicaciones de su médico
y, principalmente, tome en cuenta que el tratamiento para reducir los niveles
de colesterol, es “para toda la vida”. Reducir el colesterol, no es como bajar
la temperatura. Con un tratamiento efectivo, seguro y constante su salud cardiovascular
estará bajo control.
regresar/home
0 comentarios:
Publicar un comentario