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8/7/10

Estrategias no verbales para la enseñanza

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Guía personal para el manejo del salón de clases


Michael Grinder


Editorial PAX


La metodología pedagógica moderna es mucho más interactiva que la de fines de la década de 1970. Sin embargo, la frecuente solicitud a los estudiantes de dirigir su atención al maestro mientras realizan trabajo en equipo o de escritorio estorba su concentración. El aprendizaje cooperativo es magnífico para la enseñanza, pero dado que implica de tres a cinco veces más cambios en el foco de atención, el maestro debe ser muy preciso en el manejo de sus habilidades de manejo en el salón de clases.


Este es un excelente libro para el docente ya que le será de suma utilidad para lograr que sus alumnos presten atención y asegurarse de que éstos realmente aprendan cada una de las materias que imparte. El autor cita en su libro que un respetado profesor universitario estadounidense dijo: “Aunque nos parezca fastidioso, en realidad es una fortuna que para algunos de nuestros alumnos el inglés sea su segunda lengua, porque eso nos obliga a actuar en vez de hablar. Así, en lugar de indicar al grupo que saque una pluma y una hoja, nosotros debemos sacar una pluma y una hoja. De igual manera, si deseamos que deje de hacer lo que está haciendo, debemos dejar de movernos”.


Por lo tanto, la manera tradicional de atraer la atención del grupo consiste en advertir que es momento de empezar, con palabras que varían según el grado escolar del grupo y el estilo individual del profesor: “¡Atención!”, “Su atención, por favor”, “¡Niños!”, ¡”Jóvenes!”, ¡”Cuarto año!”, “¡Silencio!”, etcétera. Todas estas expresiones verbales trasmiten el siguiente mensaje: “ALTO: dirijan aquí su atención”.


Algo muy importante que señala Grinder: ¿Qué ocurre en caso de que el maestro acompañe su mensaje verbal de ALTO con un mensaje no verbal de movimiento? Al pedir a los alumnos interrumpir lo que están haciendo, fijarán la mirada en usted. Si en ese momento usted está caminando, percibirán una contradicción, de manera que no interrumpirán lo que están haciendo.


Puesto que el propósito de este libro es que los maestros moderen el manejo verbal del salón de clases y los alumnos presten mayor atención a los mensajes no verbales, una ardilla hembra y un macho sirven de intérpretes de este método, ya que permiten recordar que el eficaz manejo del aula se reduce a ser “tan sigilosos como una ardilla”.


De acuerdo a Grinder: con las técnicas de manejo del salón de clases, toda lección por impartir en éste consta de cuatro fases: Captar la atención, Enseñanza, Transición a la actividad de escritorio y Actividad de escritorio. Es decir, Captar la atención, significa Congelarse, Levantar la Voz (Haga una pausa) baje la voz; Enseñanza: Levantar la mano o responder, Transición a la actividad de escritorio es la Instrucción de trabajos visuales y Los veinte segundos más importantes; Actividad de escritorio: Distracción/ Neutral/ Concentración y Método de la influencia.

Predicar con el ejemplo: así es de sencillo pero eficaz método que Michael Grinder propone en este creativo libro que contiene numerosas técnicas del lenguaje no verbal para la fructífera conducción del salón de clases. La solución a varias inquietudes para la práctica pedagógica es acudir al lenguaje no verbal, rico en recursos visuales, para favorecer un ambiente que estimule a niños y jóvenes y disfrutar la aventura del conocimiento. Si el maestro se concentra y alienta sin hablar, a los alumnos no les quedará sino el feliz remedio de aprender.


Con abundantes ejercicios que enseñan a los docentes la actitud física y mental que les permitirá resolver positivamente su tarea en el aula y recoger impensables frutos más, este libro hará posible dos beneficios inmediatos: una productiva atmósfera de aprendizaje y la preservación de una sana y hasta amigable relación con los alumnos, elemento esencial y en muchos casos olvidado de toda experiencia pedagógica útil y duradera.


Algunos capítulos: las siete estrellas-guía para las cuatro fases; Captar la atención, Enseñanza, Formulario para compañeros. 297 páginas con amenas ilustraciones, ejercicios, glosario, índice analítico y una semblanza del autor.




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